El café es una de las bebidas más populares del mundo. Se calcula que diariamente se consumen 2.250 millones de tazas, aunque durante mucho tiempo se tildó de bebida poco saludable, ya que se asociaba a distintas enfermedades. Dependiendo de la variedad y la preparación, se compone de más de 1.000 sustancias, entre ellas la cafeína. El café puede ser un estimulante muy útil cuando se usa de la manera correcta, y en realidad puede hacer más por tu desempeño también fuera de la oficina.

Protege contra el cáncer

Hace años se pensó que era un posible carcinógeno. La Organización Mundial de la Salud revertió su veredicto y recientemente lanzó un comunicado que dice que no hay un vínculo entre el café y una mayor probabilidad de cáncer. De hecho, después de revisar más de 1.000 piezas de investigación, la organización descubrió que varios estudios estiman que reduce las posibilidades de padecer cáncer de hígado un 15%.

Beneficia nuestro hígado

Beber café puede ayudar a reducir el tipo de daño hepático asociado con beber demasiado alcohol, según una revisión de nueve estudios existentes. Los investigadores observaron a más de 430.000 participantes y descubrieron que beber dos tazas adicionales de café al día estaba relacionado con un riesgo 44% menor de desarrollar cirrosis hepática. En todos los estudios excepto en uno, el riesgo de cirrosis disminuyó a medida que aumentaban las tazas diarias de café. Se estimó que una taza al día estaba ligada a un riesgo 22% menor de cirrosis; Con dos tazas, el riesgo se redujo en un 43%; tres tazas de café disminuyeron el riesgo en un 57%; y se descubrió que cuatro tazas reducían el riesgo hasta en un 65%.

Quema grasa

Efectos remarcables de la cafeína que contiene el café son el aumento del ritmo cardíaco, sobre todo en personas con una baja tolerancia a esta sustancia, un efecto diurético y la mejora de la oxidación de las grasas, por lo que es recomendable en dietas que buscan la pérdida de peso o grasa. Un estudio de 2013 publicado en Nutrition and Metabolism, encontró que ingerir cafeína antes de la actividad física activa la quema de grasa en vez de la quema de energía proveniente de la glucosa.

Mejora la resistencia

Ya que la cafeína actúa sobre la sensación de cansancio, es idónea para mejorar el rendimiento deportivo, y más en ejercicios físicos que duren cierto tiempo. Los informes científicos que relacionan de forma positiva la cafeína con el ejercicio físico provienen de mediados del siglo XX. Un estudio hecho en mujeres jóvenes entrenadas mostró un efecto significativo de tolerancia a la fatiga a través de la suplementación con cafeína, y una tendencia a la mejora de la fuerza. La dosis fue de 6 mg por kg de peso media hora antes del ejercicio, es decir, para una mujer de 50 kg de peso, 300 mg de cafeína.

Mejora la memoria

Investigadores de la Universidad Johns Hopkins descubrieron que la cafeína aumenta la capacidad del cerebro para conservar los recuerdos a largo plazo. Los efectos duran hasta 24 horas, por lo que consumir 200mg o una taza diaria puede crear un nivel más profundo de retención de la memoria.

Antidepresivo natural

El café actúa como un antidepresivo y reduce significativamente el riesgo de tendencias suicidas según un estudio de Harvard. La cafeína no solo estimula el sistema nervioso central, sino que también puede actuar como un antidepresivo leve al aumentar la producción de ciertos neurotransmisores en el cerebro, como la serotonina, la dopamina y la noradrenalina. Bebe de dos a cuatro tazas por día para obtener los beneficios que mejoran el estado de ánimo.