Deporte y Vida

COACHING

10 medidas para que el verano no te produzca más estrés

Pasar más tiempo en pareja o con la familia puede ser un motivo de enfrentamiento, una mente abierta y positiva ayudará a que las vacaciones sean buenas.

0
10 medidas para que el verano no te produzca más estrés

Para Asesco, Asociación Española de Coaching, “las vacaciones son un momento clave para sacar beneficios a nuestro cuerpo y mente. Todos nosotros necesitamos unos días de descanso para recuperar el bienestar físico y emocional y liberarnos del estrés acumulado. Pero, debemos saber cómo hacerlo, de lo contrario, estos días tan deseados por todos irían en nuestra contra, perjudicándonos. Lo importante no es la duración del tiempo libre, sino la calidad de esas vacaciones.”

En muchos momentos las vacaciones de verano no son lo que esperábamos, y esas expectativas nos pueden arruinar los días de descanso. Ya sea en familia o con amigos, durante las vacaciones habrá momentos de conflicto.

Vamos a desgranar en este decálogo cómo conseguir que durante el verano el estrés desaparezca.

El dinero. Intentar organizarse tiempo antes nos puede ayudar a no tener un problema económico. Ahorrar de año en año nos puede servir para afrontar el momento más tranquilos.

Programación. Planear cada día es bueno, pero no cada hora, cada momento. Tenerlo todo bajo control puede generar angustia si algo sale mal o no como se había planificado.

Fines de semana. Las largas vacaciones son geniales pero también lo son los fines de semana, o irse varios días entre semana. La vuelta a la realidad será menos traumática y si alguien a tu alrededor se adapta mal a los cambios, será una manera de no romper tanto la rutina

Autoexigencia. En muchas ocasiones nuestro peor enemigo. No todos nuestros planes se tienen que cumplir. No hay que hacer todo el rato cosas y cosas, puede ser muy estresante. Lo ideal es relajarse y disfrutar sin exigirse el control absoluto del 100 % de todo lo que ocurra.

Positivismo. Estar abierto a los cambios, a cosas nuevas, a situaciones inesperadas ayuda a evitar la frustración y que todo fluya. Abrir la mente es clave.

Conversar. Parece que se nos ha olvidado. Pasar tiempo en familia o pareja hablando es una actividad muy relajante, aunque algunos estudios achacan ese periodo de tiempo al aumento de divorcios. No a todo el mundo le gusta estar en familia… Es clave tener paciencia y debatir las opciones de actividades.

Aceptación. Hay veces que se nos escapa lo que ocurre a nuestro lado. Lluvia, cancelación de un vuelo… Es básico asumir que en vacaciones también existen momentos donde no todo es de nuestro agrado. Para evitar la frustración tenemos que aceptar que podemos disfrutar las vacaciones y el tiempo de ocio sin la obligación de ser felices. Habrá momentos buenos y malos, y hay que disfrutarlos todos.

Conectar. No a las redes sociales, sino a lo que nos rodea, a los sentidos, a ti mismo… pararse a sentir es muy importante. A oler. A comer bien. A mirar. Nadie es imprescindible en ningún lugar.

Alimentación. Por descontado, es el momento de tener mejores hábitos, aprovechar ese tiempo de ocio para mejorar nuestra alimentación.

Ejercita la mente a través del cuerpo. Hacer algo de ejercicio nos hará estar más vitales y positivos.