El dolor de pies es una de esas molestias que se sufren en silencio. Que si el calzado, que los tacones, que si una lesión, que si la edad… todos encontramos excusas para no tratarnos como es debido un problema que afecta no sólo a los pies, al calzado que elijamos, también a las articulaciones, a la columna, a la cadera, y al final incluso a la pierna contraria.

Hemos descubierto en Deporte y Vida el implante plantar inyectable, una técnica importada de Estados Unidos que realiza la doctora María José Barba. Este tratamiento lo puede llevar a cabo cualquier persona a quien le duelan los pies “¡son resultados espectaculares! He podido ver como una monjita que tenía los pies destrozados, podía andar...”, nos cuenta.

“Se realiza para todas las mujeres que también quieran mejorar el aspecto de sus pies y que desean llevar tacones altos sin molestias”, un problema que afecta a muchas mujeres y que en algunos trabajos y ambientes condiciona sobre manera. Pero no sólo mujeres, muchos hombres que tienen molestias o quieren aumentar unos centímetros, también recurren a esta técnica. En piernas de diferentes alturas se puede aumentar hasta 6 cm.

¿Cómo es el procedimiento?

“No duele nada. Se lleva a cabo con anestesia y después no se requieren cuidados especiales salvo los dos primeros días, que no conviene andar demasiado. Nada más”, afirma. “Si bien se necesita cuidar el implante durante 7-15 días para evitar desplazamientos y se debe tomar el tratamiento prescrito de antioticoterapia, analgésico y antiinflamatorio durante los 7 días que dure el vendaje”.

De hecho, estos implantes pueden llevar también a aumentar de estatura, hasta 4 cm si así se desea, sin necesidad de entrar en el quirófano, ni de soportar molestos tratamientos...

La doctora María José Barba nos explica que “inyectando en el talón o allí donde se precise ácido hialurónico cuando se desean efectos permanentes, se logra un gran alivio en alteraciones como las de pie plano, cavo, dedos en garra, durezas, espolón calcáneo, juanetes y ojos de perdiz, evitando roces y síntomas desagradables, y mejorando notablemente el aspecto físico y no perjudicando a la columna”, nos cuenta.