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UNIVERSO FIT

6 tipos de proteína en polvo que no deberías comprar

Es bien sabido que después de un entrenamiento, el macronutriente recuperador por excelencia es la proteína. Pero cuidado, no todos los suplementos proteicos son igual de saludables

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hombre consumiendo proteínas

Seguro que todos hemos pasado por esta situación: En tus propósitos de vida saludable, decides apuntarte al gimnasio y tu amigo (mucho más pro que tú) te recomienda comprar proteínas para acelerar la recuperación post entrenamiento y suplementar tu dieta. Tú, decidido, vas y le haces caso. Aunque su consumo ayuda a la recuperación muscular, tenemos que fijarnos siempre en la letra pequeña. No todas las marcas, ni todos los tipos son igual de beneficiosos para nuestra salud, y hay algunos añadidos que pueden ser contraproducentes. Si contienen algo de esto, mejor dedícate a la clara de huevo y la lata de atún.

Con endulzantes artificiales

Lo primero que deberíamos evitar al comprar suplementos proteicos son los endulzantes artificiales. Uno de los más habituales es la sucralosa, ya que no aporta muchas calorías y consigue un sabor más apetecible. “Aunque esta sustancia está aprobada por diversas asociaciones, un consumo elevado de ella puede llevar a problemas en el tracto digestivo”, explica Carlos García Saldaña, tesorero y vocal de la Asociación Española de Licenciados, Doctores y Graduados en Ciencia y Tecnología de los Alimentos (ALCYTA).

Con carragenano

Aunque parece inocente, no lo es. Está presente en muchos productos alimenticios y en suplementos deportivos y se trata de un compuesto no digerible carente de valor nutricional. García Saldaña señala que “la FDA ha propuesto limitar su uso por el efecto inflamatorio que puede tener en el aparato digestivo”.

Con jarabe de maíz de alta fructosa o ‘high-fructose corn syrup’ (HFCS)

Este endulzante se utiliza mucho en la industria alimentaria porque es más dulce que el azúcar común y también más barato. Pero hay que tener cuidado con él: un estudio publicado en la Global Public Health relacionó el consumo de este compuesto con la diabetes tipo 2. Lo mejor sería escoger aquellas proteínas sin azúcares añadidos.

Con sabor a caramelo

Consumidos de manera responsable, los sabores artificiales no tienen por qué ser perjudiciales. Pero “algunos compuestos con sabor a caramelo pueden producirse con amoniaco y causar deficiencia en la vitamina B6, lo que puede ocasionar dermatitis, anemia, fatiga o cálculos renales”, comenta el tesorero y vocal de ALCYTA. Para evitarlo, mejor elegir aquellos con saborizantes naturales.

Con demasiados aditivos

Aunque todos los aditivos empleados en la industria alimentaria están sometidos a estudios que garantizan la inocuidad de los mismos, un exceso de algunos de ellos puede producir efectos adversos. “El glutamato monosódico, por ejemplo, puede llegar a provocar anomalías en la memoria, en la percepción, en la cognición y en las habilidades motoras” explica García Saldaña.

Por eso, y aunque no debemos alarmarnos demasiado por la presencia de aditivos en los suplementos, será siempre mejor optar por los más naturales y los que menos añadidos lleven, para que podamos identificarlos con facilidad.