El surfista australiano de 44 años, que a los 5 empezó a perder la vista paulatinamente a causa de una enfermedad genética llamada disftrofia macular, ha surfeado una ola de unos 12 metros de altura en Praia do Norte, Nazaré (Portugal). Lo ha hecho con una ceguera del 97% o lo que sería lo mismo, un 3% de visión. Nada.

"Como persona ciega, siempre había tenido el sueño de surfear en Nazaré, la ola más grande del mundo y una de las más peligrosas, algo que sabía que no sería posible sin trabajo duro y determinación", explicaba Matt Formston a través de sus redes sociales. Ese trabajo duro y esa determinación son más de 30 años de surfing, el entreno de la respiración a niveles increíbles (aguanta 5 minutos y 40 segundos), el entreno del cuerpo en el gimnasio para estar preparado para las presiones y golpes de la ola y la valentía para realizar el drop.

Con todo, Formston sacó provecho de una gran marejada de esta semana pasada para surfear por primera vez en la ola más grande del mundo y aprovechó para lanzarlo en el Día Internacional de la Discapacidad: "Cuanto más hablemos y normalicemos estas cosas, más oportunidades crearemos de accesibilidad e inclusión para todos".

"Hoy, uno de los sueños que siempre he tenido se ha convertido en realidad. La gente me dará todos los méritos, pero nada de esto hubiera sido posible sin el equipo que me rodea, que lo hacen todo más divertido y gratificante", añadía el australiano. Un equipo entre quienes estaban algunos de los mejores surfistas de olas grandes del mundo como son Vini Dos Santos o Lucas 'Chumbo' Chianca, entre otros.

Ahora, Formston viaja a los ISA Parasurfing World Championships en Pismo Beach (California, Estados Unidos) para intentar hacerse con una nueva victoria en su categoría (ya lleva 4). Afirma que está hambriento y que solo le vale el oro. “De la ola más grande del mundo a la más pequeña”, bromea. Todo ello tras proclamarse también tricampeón mundial de paracaidismo y campeón paralímpico de ciclismo en pista. Todo un atleta y un ejemplo de superación.