Graban el ataque a traición de un leopardo a un ciclista
Las cámaras de seguridad de una carretera del Parque nacional de Kaziranga (India) graban cómo el felino sale de la nada y luego vuelve al bosque.
En los deportes de aventura, incluso la excursión o el paseo más simple se puede convertir en una odisea. Así lo demuestran dos vídeos que llegan hoy desde distintas partes del mundo en los que no hay nadie demostrando sus habilidades extremas por senderos o en MTB. Simplemente gente de paseo/excursión por la naturaleza que se encuentran con animales temibles como un leopardo y un oso.
Leopardo contra ciclista
El primero de los vídeos ocurre en el Parque nacional de Kaziranga (India), al sur del río Brahmaputra, sobre las llanuras constantemente inundadas por los monzones. Famoso, por cierto, por su población de rinoceronte inidio (más de 1000 ejemplares) y zona protegida. Pero no es un rinoceronte el protagonista de esta historia, sino un leopardo que aparece de la nada (o más bien desde el bosque) para atacar a un ciclista que únicamente circula al margen de la carretera de excursión o de simple paseo. Tras dejarlo en el suelo y con el miedo en el cuerpo, el felino vuelve entre los árboles y desaparece. La víctima, por su parte, se apresura a coger de nuevo la bici y volver por donde ha venido, con dos ciclistas más que le esperan para saber si está bien. No como el coche rojo, por cierto, que frena un poco y sigue como si nada. El suceso lo grabaron las cámaras de seguridad del Parque Nacional indio.
Oso contra familia
El segundo vídeo es el de una familia (madre, padre, dos niños, uno en la mochila y el otro andando) que va de excursión por la montaña. La madre graba cómo un oso negro persigue a los otros tres miembros del grupo. En este caso la persecución ocurre en Whistler (Columbia Británica, Canadá). Durante el clip se puede ver cómo los padres gritan y agitan los brazos para hacerse grandes, a ver si así el oso desiste en su persecución. Hasta le gritan que se vaya a casa. Y en todo momento le piden al niño que anda que no corra, pero que camine rápido. Una actuación muy correcta, siguiendo las recomendaciones de las autoridades para estos encuentros con un animal salvaje como el oso. La excursión acabó bien para la familia y el oso acabó desistiendo (tras un buen rato).