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Tahnée Seagrave no consigue ver la luz al final del túnel

La vida del piloto de MTB Downhill no es fácil. Las lesiones están a la orden del día y lidiar con la salud mental se convierte en una odisea.

Tahnée Seagrave, la piloto de MTB, vestida de gala a la izquierda con un vestido gris y tacones, con una copa en la mano; y a la derecha equipada para ir en bici de color rosa y casco Red Bull, con su bici Canyon.
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Tahnée Seagrave lleva compitiendo ya más de 7 años en la élite del Descenso en Mountain Bike, en los que ha acumulado ocho victorias e innumerables podios tanto en pruebas individuales como en la clasificación general de la World Cup. Pero los últimos tiempos no están siendo nada fáciles para la británica, quien se dislocó el hombro, luego el tobillo... y cuando parecía recuperada de ambas, una conmoción cerebral -que le genera ansiedad severa- ha aparecido para mostrarle el STOP de nuevo.

Hace unas semanas, Seagrave publicaba un vídeo en el que explicaba el proceso de haber superado sus lesiones. "En poco tiempo he redescubierto mi pasión por ir en bici, lo he odiado, me he lesionado... ahora parece que poco a poco se empieza a disipar la niebla", afirmaba. Y añadía: "Desde pequeña siempre he querido ser la mejor y no soportaba no serlo, competir forma parte de mi vida, de mi normalidad, pero tras las lesiones... me está costando mucho y cuando no puedes hacer lo que te hace feliz, es complicado".

Así, asegura que durante un tiempo se dedicó a buscar otras aficiones y, por ejemplo, empezó a darle una segunda vida a piezas de ropa que ella tenía, lo cual la ha tenido bastante entretenida e incluso asegura que es "terapéutico". Hablando de ropa aprovecha para sincerarse sobre que "de pequeña no me gustaba el rosa, ni las bicis, ni los vestidos... ahora estoy locamente enamorada de todo". Y espera que "los niños y niñas de hoy en día puedan jugar con barbies, ver downhill en TV y luego salir a ensuciarse", porque en su época "parecía que o eras guapa o eras buena, cuando se pueden ser las dos cosas". Por eso hoy en día viste de rosa: "Si te sientes bien contigo, montas más rápido".

Volviendo a la competición, explicaba que en la UCI MTB World Cup hay más nivel que nunca y que su cabeza se ha convertido en una montaña rusa: "Unos días estás brutal y otros no quieres salir de la cama". Y aunque parecía que había encontrado la manera de sentirse brutal y volver al máximo nivel, una caída de hace unas semanas -conmoción cerebral incluida- le está generando ansiedad severa y no competirá este fin de semana en Fort William. Además, asegura que la conmoción simplemente fue lo que la hizo "desbordar", pero que lo ha pasado muy mal en los últimos meses por un tema "tabú" y que no encuentra las palabras para expresarlo, así que habrá que esperar a que lo haga más adelante.

Con suerte, tratándolo como es debido y con la ayuda necesaria, Tahnée volverá a ser la que era porque, como ella misma afirma, "la pasión nunca se irá" y, en el fondo, todo te hace crecer: "Sin las lesiones no sería la atleta que soy hoy en día, tengo mucho más por lograr, conseguir y mostrar. La lección más importante que saco de todo esto es que tengo que cuidarme". Y eso está haciendo.