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TOUR DE FRANCIA | ETAPA 17

Vingegaard: “El plan funcionó”

El danés, que dejó su segundo Tour encarrilado, celebró su entrada en meta y rápidamente fue a ver a su pareja y a su hija: “Todavía no estamos en París”.

CourchevelActualizado a
Vingegaard: “El plan funcionó”
Jesús Rubio

Jonas Vingegaard y el Jumbo celebraron en meta. No es para menos. El danés venía diciendo tiempo atrás que, pese a la diferencia de segundos que había entre él y Pogacar, la carrera se decidiría por minutos, que alguno de los dos cedería, y tuvo razón. En la crono dio un golpe sobre la mesa, sacando 1:38 al esloveno (1:48 en total) y en Courchevel dejó el Tour visto para sentencia, escapándose al frente con una ventaja superior a los siete minutos sobre el doble campeón del Tour. “No esperaba tener tan buen día. Es difícil de describir. Digamos que estoy aliviado. Conseguir una ventaja de siete minutos es fantástico. Sin embargo, todavía no estamos en París. Quedan etapas con trampas y estoy convencido de que Pogacar intentará algo”, dijo el danés, con la cautela esperada. Nada más cruzar la meta fue a ver a su pareja, Marie Trine, que se bajó la mascarilla para darle un beso. Rápidamente, se la volvió a subir. Entre medias, la hija de ambos: la pequeña Frida.

También habló sobre la caída de Pogacar, ya que estaba al lado del esloveno cuando sucedió. Estaba detrás de Tadej cuando se cayó. Alguien tocó su rueda y es una pena. Cuando se fue al suelo, levantamos el pie hasta que regresó al grupo para no sacar partido de la situación. No sé cómo le puede haber afectado la caída a lo largo de la etapa”, añadió el danés, que a sus 26 años está a un paso de reinar en París. “Teníamos un plan durante todo el Tour, y funcionó. Este plan se hace un poco en función de mis cualidades. Empieza en diciembre y, durante los meses siguientes, se va retocando. Nos ceñimos al plan porque creemos que es lo mejor”, dijo sobre su estrategia junto a su equipo, el Jumbo.

De nuevo, el danés fue cuestionado por el escepticismo sobre los resultados actuales, después de que se batieran récords de subidas de épocas anteriores, de la era de Lance Armstrong: “Es difícil saber qué más puedo decir. Entiendo que es difícil confiar en el ciclismo con el pasado, pero sí, creo que hoy en día todo el mundo es diferente de lo que era hace 20 años. Y puedo decir desde mi corazón que no tomo nada. No tomo nada que no le daría a mi hija, y definitivamente no le daría ninguna droga”, sentenció Jonas.