Rex gana tras una larga espera en el enfado del favorito De Lie
El belga conquista Le Samyn tras un esprint ajustado. Morgado, en una brillante remontada, acarició el triunfo. Arnaud de Lie se fue al suelo y abandonó.
Le Samyn es una de las clásicas belgas algo atípica a las tradicionales, con adoquín y, tradicionalmente, con buen recorrido para los velocistas. Inicio en Quaregnon y desenlace en Dour tras 204 kilómetros. Por cartel, no aparecían grandes nombres destacados del pelotón, pero por recorrido tradicionalmente suele ser una carrera entretenida, y eso sucedió de nuevo en esta 56ª edición. La victoria fue para el belga Laurenz Rex, corredor alto que supera los 1,90 metros y que logra su primer éxito como profesional. A sus 24 años, el del Intermaché tuvo que esperar para saber que había ganado, porque el esprint fue muy ajustado ante un espectacular Antonio Morgado.
El portugués del UAE, a sus 20 años, realizó una gran remontada que casi le da la victoria. El éxito fue para Rex, que tras esperar toda su carrera para poder celebrar un éxito, tampoco tuvo problema en aguantar diez minutos más hasta que los jueces dieron el veredicto final. De hecho, el propio Rex celebró al cruzar la línea de meta y se arrepintió al momento. Miró a su derecha y vio que Morgado había entrado prácticamente a la par. ¿Quién era el ganador? Hubo dudas, y de hecho la decisión tardó más de lo normal. Rex suspiró. Sin embargo, en la salida el gran favorito era belga Arnaud de Lie. Con el dorsal 2, el del Lotto se postulaba como el rival a batir, pero no tuvo su día.
Tras tener que cambiar de bicicleta, el belga se fue al suelo en una curva a derechas en solitario. Se levantó muy enfadado, quejándose al coche de equipo y amagó con retirarse. De hecho, llegó a abrir la puerta trasera y estuvo un rato dialogando, de forma airada, con uno de los directores. Finalmente siguió, con el culote ensangrentando, y aprovechando que el tramo final era un circuito, vio el autobús de su equipo aparcado junto a la carretera. Paró, apoyó su bicicleta y subió las escaleras. Ya no tenía opciones y abandonó.
Otra caída, esta vez en el pelotón, dejó fuera de combate a Moschetti, otro de los corredores vigilados para el final. Tras todo, un esprint reducido con Uno-X y Arkea sin poder exprimir sus bazas y un mano a mano entre Rex y el sorprendente Morgado que cayó del lado del primero. Esto último luego también mostró felicidad en meta: “No me gustan este tipo de carreras. Estoy contento, no soy esprínter”. Otra perla del UAE. El podio lo cerró el belga Biermaans, del Arkea, mientras que la representación española en la carrera fue a cargo del Kern Pharma.