NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

CICLISMO | TIRRENO-ADRIÁTICO

A Roglic no le quedó otra que ganar

El esloveno logra su segunda victoria en la Tirreno-Adriático tras un esprint en un grupo muy amplio tras ascender Sasotetto. Además, nuevo líder. Enric Mas lo intentó.

Actualizado a
A Roglic no le quedó otra que ganar

Por segundo día consecutivo, Primoz Roglic volvió a alzar los brazos en la Tirreno-Adriático. El esloveno regresó a la competición en la cita italiana tras una ausencia de seis meses tras su dura caída el pasado mes de septiembre en La Vuelta y, pese a que el Giro de Italia es su principal objetivo a medio plazo, el del Jumbo sigue afinando de la mejor manera: compitiendo y ganando. La de Tortoreto el jueves fue una victoria marca Roglic, con ese rush final casi insuperable, mientras que este viernes, en Sassotetto, no le quedó otra que remachar. El viento también marcó la carrera, al igual que en la París-Niza (se canceló la etapa del día).

Inicialmente se iba a llegar hasta la cima, pero debido al viento no se subieron los 2,5 km definitivos. En total, quedó una ascensión de 10,7 km al 7,3% de media, y todo quedó deslucido por el viento. Lateral y de cara en algunas ocasiones, hacía muy difícil que cualquier intentona en el puerto tuviera éxito. Por ello el desenlace fue el que en condiciones normales no se hubiese visto: un esprint entre los favoritos, y ahí Roglic es letal. Además, se pone líder de la carrera a falta de las dos jornadas del fin de semana, especialmente complicada la del sábado, porque la del domingo es para velocistas. Realmente, no se puede saber a ciencia exacta cómo está Roglic respecto a otros escaladores, porque está siendo una carrera extraña, pero lo que se descarta es que esté mal.

La fuga, de siete corredores que luego pasó a ser de seis, tuvo su fin a 30 km de meta... y en la aproximación al puerto se vio a un Movistar ambicioso, tomando la delantera del grupo en favor de los intereses de Enric Mas, y el balear respondió. Lo intentó. Primero fue Caruso, a falta de 4,5 km de meta, el que saltó, y logró abrir una renta superior a los veinte segundos. Por detrás, perseguía un grupo muy numeroso con el viento como protagonista. En el tramo final fue Enric Mas el que agitó todo, llegaron a rueda de italiano y el del Movistar pidió relevos a un Ciccone que no aceptó la propuesta.

Entonces, todo se encaminaba a un esprint en una cima, algo poco habitual, y Kelderman endureció la llegada en favor de su compañero Roglic, que pese a estar durante la subida sin asomarse en la parte delantera, no tuvo otra que rematar. No levantó los brazos en meta, como si fuera un día más en la oficina (su victoria número 67). Este sábado, un día quebrado, con cuatro subidas, incluido el final en Osimo tras 193 km en un día que aspira a ser clave para la general.

Clasificación de la quinta etapa

1º Primoz Roglic (ESL/Jumbo) 4h 38:04

2º Giulio Ciccone (ITA/Trek) m.t.

3º Tao Geoghegan Hart (GBR/Ineos) m.t.

7º Mikel Landa (Bahrain) m.t.

General

1º Primoz Roglic (ESL/Jumbo) 20h 17:14

2º Lennard Kämna (ALE/Bora) a 4

3º Joao Almeida (POR/UAE) 12

10º Enric Mas (Movistar) 31