El campeón Evenepoel dijo ‘adiós’ a la corona en el Aubisque
Al poco de comenzar la corta etapa, el vigente campeón de La Vuelta se descolgó de los favoritos y no podrá reeditar su título en Madrid.
Todavía quedaban 90 km para terminar (de los 135 que constaba la etapa), la primera gran ascensión del día, el Aubisque, estaba arrancando tras el descenso del Portalet… y Evenepoel no pudo seguir el ritmo de los mejores. El Jumbo aceleró la marcha, dejó el grupo muy reducido y el belga, vigente campeón de la carrera y que lucía el maillot blanco de mejor joven, fue el gran damnificado. En la cima perdía más de un minuto, y la ventaja no paró de crecer. Quedaba casi toda la etapa por delante y desapareció. Llegó a más de 27 minutos de Vingegaard a la cima del Tourmalet. Tras cruzar la meta, se puso ropa de abrigo y se marchó rápidamente al autobús del equipo. Ahora es 19º en la general.
Esta Vuelta era importante para Remco, porque a sus 23 años, una de las ideas a corto plazo era debutar en el Tour y, obviamente, estar en la disputa. Sin embargo, en una Vuelta bastante más montañosa que la conquistó hace un año, el del Soudal Quick Step se despidió de la general en la segunda semana en una de las etapas reinas. A su corta edad, suma 48 conquistas, entre las que hay Monumentos, Mundiales (fondo y crono), la citada Vuelta… un palmarés que pocos corredores lograrán alcanzar en toda su trayectoria, pero para Remco fue un día complicado. En esta edición llegó a ser líder tras su triunfo en Andorra... y escasos metros después sufrió una caída tras cruzar la meta.
“No se puede decir mucho sobre esta etapa. Simplemente fue un mal día para Remco: no estaba enfermo ni herido. Es lamentable y puede suceder. El ciclismo no es una carrera en un simulador y todos somos seres humanos. Esta noche nos sentaremos como equipo, evaluaremos lo sucedido y analizaremos nuestros objetivos para el resto de la carrera”, dijo el director deportivo de Soudal Quick-Step, Klaas Lodewyck.