Con Silvia y contra los límites
Abel Antón, doble campeón mundial de maratón, se enrola en el proyecto de Aural Team para ayudar a Silvia González a completar la Titan Marruecos tras superar un cáncer.
¿Qué hace un doble campeón del mundo de maratón subido a una bici por el desierto de Marruecos? Responde Abel Antón, el mejor en los 42,195 metros en 1997 y 1999: “Me gustan este tipo de proyectos solidarios. El reto de Silvia es muy importante, porque no hace más de un mes pasó por el quirófano y ya está entrenando”. Silvia es Silvia González (52 años), monitora de ciclismo y creadora de ‘Ciclismo para todas’, que en diciembre fue sometida a un autotransplante de médula para luchar contra un linfoma de Hodgkin y se ha propuesto vencer a la Titan Desert Marruecos. Una de las carreras de bici de montaña más duras del mundo, seis etapas (28 abril-3 mayo), a más de 100 km por día, dunas, mucho calor y más de 7.000 metros de desnivel.
Antón y González son las caras visibles del Aural Team (centros auditivos), que dentro de su proyecto ‘Ejemplos de superación’ aspira “a dar visibilidad a historias de personas que a pesar de sus problemas de salud han optado por afrontarlos y llevar una vida saludable”, contó Juan Ignacio Martínez, director general de la empresa y también aspirante a Titan, en la presentación que tuvo lugar hoy en el Consejo Superior de Deportes (CSD), apoyada por Fernando Molinero, director de Deportes del organismo.
“La Titan es una barbaridad, el Dakar de la bici de montaña”, se escuchó. De ahí la actitud de equipo para superarla. A Silvia le descubrieron el linfoma hace años, tras sufrir un accidente de bicicleta en el que se fracturó la pelvis bajando Navacerrada. Lo curó, pero ha vuelto. “Soy de ver siempre el vaso medio lleno. Al final, tengo que agradecer a la caída que me detectaran el cáncer. La bici es mi trabajo y mi pasión. Estaba con el tratamiento de quimioterapia, hacía 100 km y me cansaba más, pero no me he sentido enferma. La gran mayoría se queda en casa, se vienen abajo. Y la actitud y el superarnos es importante y quiero visibilizarlo”, explica la madrileña, todavía con mascarilla porque hasta febrero no podrá ser vacunada y debe andar con cuidado. Fiel a su lema ‘A tope de power’.
El reto no será fácil. Eso lo tienen claro todos. Incluso Antón (61 años), que aunque motor no le va a faltar, nunca ha realizado una carrera de MTB por etapas. “En mi carácter siempre ha estado el sufrimiento. Ganar campeonatos del mundo no es gratis y por capacidad de sufrimiento no va a ser”, avisa mientras no para de desgastar zapatillas. La media de Sevilla, maratones, más de 20 carreras al año... “Ahora tengo que empezar a salir con la bici tres días a la semana y ponerme las pilas. Debo adaptarme muscularmente. Los ciclistas tienen mucha más ‘pata’ y me agarroto, por lo que el trabajo de gimnasio es fundamental. Pero será cuestión de adaptarme”, describe. En la Titan, cada cual tiene su propósito. El de él, y del resto del Aural Team, será que Silvia se supere.