Descubierta una de las claves de la victoria de Matej Mohoric
El esloveno descendió de una forma impecable el Poggio de San Remo. Parte de esa gran gesta la tiene una tija telescópica que la bicicleta incorporaba.
El campeón de Eslovenia en Ruta, Matej Mohoric, sorprendió con su victoria en la Milán-San Remo. Había nombres que partían como favoritos: Van Aert, Pogacar, Roglic, Jakobsen... Sin embargo, el nacido en Kranj brilló en un descenso magnífico -a la vez que peligrosísimo-, lo que le hizo alzarse con La Classicissima.
Además de su indudable atrevimiento, ha salido a la luz que la bicicleta de Mohoric incorporaba una herramienta que le permitió arriesgar más incluso en el descenso. Se trata de una tija telescópica. Esta posibilita al corredor adoptar una mejor postura en las bajadas, ya que puede bajar su centro de gravedad, y así lograr una mayor rapidez y mayor control de la bicicleta.
No es algo del todo nuevo en el mundo del ciclismo, ya que no se supo a ciencia cierta si Vincenzo Nibali la usó en la última etapa del Giro en 2016. Sin embargo, no es nada habitual, ya que el uso de las tijas telescópicas es propio de las carreras de MTB. A través de un control remoto en el manillar, el corredor puede bajar o subir la altura del sillín.
El propio Mohoric admitió que la tija telescópica le ayudó en el descenso. "Me habían preparado una bicicleta especial para mejorar bajando. Al principio, no creía que fuese una gran ventaja, pero al probarla vi que sí. He podido seguir el ritmo de los mejores y abrir hueco bajando", señaló tras su victoria.