A las faldas de las Montañas de Rocacorba, en Girona y muy cerca del Lago de Banyoles, la ciclista sudafricana Ashleigh Moolman ha establecido su particular campamento ciclista, el Rocacorba Cycling, en el que se mezclan la tradición de las masías catalanas con la innovación del ciclismo virtual. Una forma de practicar ciclismo que cada vez ha ido ganando más adeptos y que, con los años, ha dejado de ser solo exclusivo de profesionales, para además convertirse en herramienta casi imprescindible para el pelotón y los aficionados a la bicicleta durante los meses del confinamiento a causa de la pandemia.

La ciclista del SD Worx, de 36 años y que en los últimos días ha anunciado que esta será si última temporada como profesional en la carretera, se ha convertido en uno de los grandes estandartes del ciclismo femenino virtual, tal y como muestra el maillot arcoíris que conquistó en los primeros Mundiales de Ciclismo Esports que se celebraron en 2020 y que aspira a revalidar en la segunda edición de la carrera que se disputará el próximo 26 de febrero y que estará organizada por la UCI con el apoyo de la plataforma digital Zwift, una de las grandes herramientas para el pelotón.

Moolman recibió a AS en su cuartel de Rocacorba Cycling con motivo de la última prueba de la Zwift Premier League, la máxima categoría de competiciones regulares de la plataforma, en la que su equipo, el Rocacorba Collective, compite junto a otros 13 equipos destacados de todo el mundo en la que se podría considerar la Champions League del ciclismo virtual en formato de liga. Cada victoria supone 20 puntos para el equipo vencedor mientras que los tres últimos descienden de categoría.

En una de las habitaciones del Rocacorba Cycling Moolman nos muestra cómo es la sala en la que compite actualmente y donde se prepara para la decisiva cita de los Mundiales de Ciclismo Esports. Aquí tampoco faltan el maillot arcoíris de campeona del mundo conquistado en 2020, la prensa del Rocacorba Collective y su bicicleta Specialized con los colores arcoíris que le distinguen como campeona del mundo de la modalidad, además de los rodillos, zapatillas y bidones que emplea durante la carrera y la pantalla de televisión, que durante cerca de una hora se convierte en su particular carretera con sus rampas, bajadas y tramos llanos sobre paisajes futuristas que también llaman la atención de los aficionados ya sea a la hora de afrontar una carrera virtual o bien presenciándola a través televisión.

AS pudo vivir en directo junto a Ashleigh Moolman la última carrera de la temporada en la Zwift Racing League del Rocacorba Collective, que se disputó sobre el exigente trazado de Climber's Gambit, de 27,9 kilómetros con un total de 670 metros de desnivel positivos concentrados la gran mayoría de ellos en la subida final. En un paisaje virtual que deleita al espectador con zonas de desierto, vegetación e incluso rodando por acuarios bajo el mar, Moolman se mantuvo en cabeza del grupo durante gran parte de la carrera mientras sus compañeras de equipo intentaban sumar puntos en los esprints intermedios antes de la exigente subida final con cunetas cubiertas de nieve para dar más épica si cabe. Apoyada por su marido y también por el director táctico del Rocacorba Collective, Moolman hizo gala de sus dotes como escaladora y, tras aguantar los ataques en la parte inicial de la subida, puso un ritmo machacón imposible de seguir para sus perseguidoras en las durísimas rampas de los dos kilómetros finales y conseguir así la victoria.

Un triunfo que le da más confianza si cabe a Moolman para afrontar la decisiva cita del próximo 26 de febrero en los Mundiales de Ciclismo Esports que organiza la UCI en colaboración con Zwift y que se disputarán sobre un recorrido de 54,8 kilómetros inspirado en el Central Park de Nueva York y que consistirá en dar dos vueltas y media a un recorrido conocido como Knickerbocker Route y que contará con tres subidas a la cima de NYC KOM Forward! La última de ellas será en el tramo final de la prueba por lo que decidirá a la campeona del mundo de Ciclismo Esports 2022 en un título que Ashleigh Moolman espera revalidar. El ciclismo virtual quiere seguir abriéndose camino como alternativa a la hora de hacer deporte en bicicleta y dejar de ser considerado como un mero rodillo de entrenamiento para convertirse en una forma de ciclismo que siga mezclando la tradición de un deporte social y que crea comunidad, con la innovación y la entrada de las nuevas tecnologías para seguir disfrutando sobre la bicicleta.