CICLISMO

Alaphilippe: "Todavía me faltan muchas carreras por ganar"

El francés del Deceuninck, bicampeón del mundo, habla con AS sobre la consecución de su segundo maillot arcoíris y sus desafíos para el futuro.

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Alaphilippe: "Todavía me faltan muchas carreras por ganar"
CHEMA DÍAZ DIARIO AS

Julian Alaphilippe (Saint Amand Montrond, 29 años) es una de las principales figuras del pelotón internacional. Ganador de etapa en Tour y Vuelta, de clásicas de pedigrí y de un monumento, la San Remo… pero, sobre todo, doble campeón del mundo. El francés habla con AS de sus éxitos y de sus objetivos de futuro.

Su primera campaña como campeón mundial la completó con una defensa exitosa del arcoíris en Bélgica, territorio hostil y cuna de leyendas.

(Risas). Cuando rodaba en busca de la victoria, el público me decía que redujera el ritmo para que me atrapara Van Aert por detrás. Más allá de esa situación, existen pocos lugares más sagrados en el ciclismo para conquistar un Mundial, aunque cualquiera sea bueno. Después de la ceremonia del podio, festejé el título con los fans, que me mostraron su aprecio. Compito para un equipo de Bélgica, el Deceuninck, y me encantan las clásicas flamencas. Se podría decir que me considero un poco belga.

¿De verdad la táctica de Francia era que atacara a 60 y 20 km de la meta?

Las cosas no salieron al detalle tal y como las planeamos, desde luego (sonríe con intención). Pero cuando notas que llevas unas fuerzas pletóricas, debes probarlo. En mi caso, me gusta correr de manera ofensiva y dejarme aconsejar por las sensaciones, no pensar tanto en los vatios. Pese a que Thomas (Voeckler, el seleccionador francés) no recomendó la estrategia, importaba más el resultado final.

En 2020, en su estreno del maillot arcobaleno en la Lieja, celebró antes de tiempo ante Primoz Roglic y luego quedó relegado por maniobra ilegal.

Seguramente, el mayor fallo de mi trayectoria deportiva. Cuando portas este jersey tienes un plus de responsabilidad, hay que hacer las cosas bien para transmitir un mensaje positivo. Sin embargo, también provoca cierta ansiedad por lucirlo y lucirte. Ahí cometí un grave error.

¿Demasiada presión?

Probablemente. La gente espera más de ti, y tú deseas complacerles. Por eso debes aprender a vestir este maillot sin complejos, pero con humildad, para no decepcionar a los aficionados, a la escuadra ni a ti mismo.

¿Agobia la fama?

Alguna vez, aunque procuro manejar mi día a día con normalidad, como padre y profesional de la bicicleta.

¿Cómo es la vida con su primer hijo, Nino?

Cuesta salir de casa (reside en Andorra), porque además Marion (Rousse, su pareja) tiene muchas obligaciones como comentarista y de directora del Tour femenino. Estoy orgulloso de ella, y pretendo que mi familia y mi niño se sientan igual con mis actuaciones dentro y fuera de la carretera.

¿Y sus objetivos para 2022?

Ufff, todavía me faltan muchas carreras por ganar. Quisiera conquistar la Lieja, otro Mundial, Flandes, Lombardía… No conozco el Giro y me motiva el reto de sumar etapas en las tres grandes. Se acumula el trabajo, pero para esto compito: intentar vencer lo máximo.