La espectadora que provocó la caída en el Tour se enfrenta a cuatro meses de prisión

La espectadora que portaba el cartel 'Allez Opi-Omi' y que provocó una caída masiva en la primera etapa del Tour de Francia 2020 después de invadir la carretera y de que Tony Martin chocase con el cartel, ha comparecido este jueves en un tribunal de Brest acusada de los delitos de lesiones involuntarias y poner en riesgo la seguridad de otros.

Según recoge el periódico francés Ouest France la joven, de 31 años, llegó al tribunal visiblemente afectada ante el revuelo que ha generado el juicio. En la vista se ha pedido para la espectadora una pena de prisión condicional de 4 meses por provocar la caída, después de que se llegase a hablar de que la aficionada podría enfrentarse a un año de cárcel y 15.000 euros de multa. La sentencia sobre este caso se conocerá el próximo 9 de diciembre.

En el juicio la fiscal Solenn Briand destacó que la espectadora había "reconocido la peligrosidad de su comportamiento" a la vez que había pedido perdón por esas acciones. Una versión que también alegó el abogado de la aficionada Julien Bradmetz, que dijo que se trata de una mujer "con personalidad frágil durante muchos años, y esta fragilidad se ha multiplicado por diez, por lo que mi cliente está viviendo un infierno".

En el caso también ha entrado la Asociación de Ciclistas Profesionales (CPA), que antes del juicio emitió un comunicado en el que pedía la compensación simbólica de un euro para concienciar sobre el respeto a los ciclistas. "El daño que sufren los ciclistas es físico, moral y económico. Un ciclista se prepara muchos meses para una gran vuelta y no es de recibo que su trabajo, el de su familia y su equipo sea destrozado en un momento porque alguien busque popularidad en un evento donde no deben convertirse en los protagonistas", manifestó Gianni Bugno, presidente de la CPA.

Bugno también reveló a qué se debe la petición de compensación de un euro que han solicitado. "Estamos seguros de que la espectadora no quiso hacer daño intencionado a nadie, pero su despiste comprometió la salud y la temporada de varios ciclistas. La compensación de un euro que hemos pedido no paga la fractura de ambos brazos de Marc Soler ni las heridas sufridas por Tony Martin y el resto de ciclistas que se vieron afectados por la caída, pero sí tiene un valor simbólico". De esta forma la CPA pide "una actitud responsable y respetuosa hacia los ciclistas en el desempeño de su profesión. Las imágenes del cartel han dado la vuelta al mundo y deben ser un aviso para que estos episodios no vuelvan a suceder".