CICLISMO
El TSJA rebaja a nueve años y medio de prisión la pena al hombre que prendió un bus
Este hombre, en agosto de 2017, prendió fuego al autobús del equipo Aquablue Sportque se encontraba en Almería con motivo de La Vuelta a España.
El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha bajado hasta los nueve años y seis meses de prisión la pena impuesta a un hombre que en agosto de 2017 prendió fuego al autobús del equipo Aquablue Sport que se encontraba en Almería con motivo de La Vuelta a España, así como a varios inmuebles y contenedores durante la misma noche.
En su sentencia, el tribunal estima parcialmente los recursos impulsados por la defensa y la Fiscalía en cuanto a la calificación jurídica de los hechos y a la pena impuesta al acusado, por lo que le condena por un delito continuado de incendio con riesgo para las personas de menor entidad. Inicialmente había sido condenado a diez años de prisión por un delito de incendio y a otros dos por un delito continuado de daños.
El Alto Tribunal andaluz da por probado que durante la madrugada del 31 de agosto de 2017, el acusado prendió fuego al autobús perteneciente al equipo Aquablue Sport de la Vuelta Ciclista a España que se encontraba estacionado en la Travesía de San Luis de Almería, en las inmediaciones del Hotel Tryp Indalo, quemando para ello previamente un colchón situado bajo el vehículo.
Como consecuencia de este acto resultó calcinado el autobús, valorado en unos 200.000 euros, y el material deportivo que había en su interior, valorado en otros 50.000 euros. El tribunal estima que el acusado era consciente de que el autocar se encontraba aproximadamente a un metro de un inmueble, en concreto el número 14 de la Travesía de San Luis, "con el consiguiente riesgo para sus moradores". En dicha vivienda dormía una mujer con una ventana abierta y usando un aparato de respiración asistida al tener problemas respiratorios.
La mujer, al percatarse del fuego, se acercó corriendo a cerrar la ventana, "llegando a quemarse levemente las yemas de las manos aunque sin sufrir lesión objetivamente apreciable". Acto seguido abrió la puerta de la calle para huir del incendio pero "había mucho humo y, como se asfixiaba, se tuvo que refugiar de nuevo dentro de la vivienda hasta que fue rescatada". Los daños al edificio y al domicilio de la perjudicada fueron tasados en 4.544,98 euros.
El tribunal ya consideró que no había quedado acreditado que sufriera daños el inmueble del número 12 de la misma calle tras la actuación del acusado, que vestía una chaqueta reflectante que instantes antes había sustraído de un coche; hechos por los que ya fue condenado por un juez de lo Penal.
Además de incendiar el autobús, durante la misma noche el acusado prendió fuego a un contenedor de basura ubicado en el número 123 de la calle Real del Barrio Alto, muy cerca de su domicilio, así como a otro en la Avenida Santa Isabel. Más tarde, accedió a un portal de la calle Real del Barrio Alto y, "consciente de la situación de peligro en que colocaba a los moradores" prendió fuego a la puerta de madera del cuarto de contadores y cuadros eléctricos, provocando una gran cantidad de humo que se extendió rápidamente por todo el inmueble y causando daños cuyo importe se desconoce.
El incendio en el cuarto de contadores, estimado inicialmente como un delito de daños, finalmente es subsimido en el delito de incendio con peligro para las personas en cuanto afectaba a todos los que se encontraban en el interior del inmueble. "El peligro para estas que provocó el incendio así descrito resulta indiscutible en una valoración exclusivamente jurídica", apunta el TSJA. El acusado fue detenido por agentes del Cuerpo Nacional de Policía sobre las 4,15 horas con tres mecheros y un papel empapado con disolvente cuando se disponía a prender fuego a otro contenedor en las proximidades.