Ulissi se impone a un combativo Sagan en la antesala del Etna

El Giro tuvo su primera etapa en línea en esta segunda jornada por Sicilia, la isla más poblada de Mediterráneo, con alrededor de cinco millones de personas. La meta era en Agrigento, la localidad italiana en la que el francés Luc Leblanc se proclamó campeón del Mundo en 1994, unos Mundiales a los que Miguel Indurain renunció para preparar el Récord de la Hora que posteriormente consiguió. El triunfador en el exigente final fue para Diego Ulissi en una llegada ideal para sus características. En el tramo decisivo, el UAE endureció el ritmo para la subida (cota de 4ª categoría) con un Valerio Conti que se llevó gran parte del mérito de la victoria de su compañero. "Planeamos este final y todo salió como esperábamos", dijo el triunfador. Ganna mantuvo el liderato en un Giro que por el momento solo habla italiano tras dos etapas. Por algo es su carrera.

La primera fuga de esta edición, formada casi de salida, estuvo compuesta por Gastauer (Ag2r), Bais (Androni), Tonelli (Bardiani), Van Empel (Vini) y un habitual de estar por delante del pelotón, Thomas de Gendt (Lotto). El grupo les tuvo controlados en todo momento y, pese a que el belga era el más activo de la escapada (fue 3º en el Giro 2012), el empuje de Bora y Sunweb fue suficiente para neutralizar a 10 km de meta. Uno de los grandes perjudicados del día fue el Astana, que en tan solo dos jornadas ha quedado muy debilitado: Supermán López abandonó tras acabar en el hospital por una caída la contrarreloj inaugural y el ruso Vlasov se bajó de la bicicleta en la segunda jornada por problemas estomacales.

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Fuglsang se queda sin sus dos grandes compañeros para estar en la pugna por la general. Tendrá que depositar gran parte de su confianza en el navarro Óscar Rodríguez, uno de los cinco compañeros que le quedan con casi tres semanas por delante. Y en el propio Astana genera cierta preocupación, porque varios integrantes del equipo kazajo dieron positivo por coronavirus a última hora antes de la carrera. El Giro no puede garantizar las condiciones extremas de seguridad que tuvo el Tour, aunque RCS planteó todos los escenarios posibles con el objetivo de poder llegar a Milán el próximo día 25.

En Agrigento también Sagan dejó claro que no viene al Giro por cumplir tras firmar un gran contrato a inicio de temporada por estar por vez primera en la Corsa Rosa. Sin compañeros, en solitario, fue capaz de remontar en la ascensión final y estuvo en la lucha por el triunfo, aunque Ulissi, de 31 años, no dio la más mínima opción y sumó su séptima victoria en el Giro, la primera desde 2016. Sagan lucirá en la tercera jornada un maillot poco habitual en él: el de la Montaña, ya que suma cuatro puntos. Ellos dos junto a Matthews (4º), eran los tres grandes favoritos del día. En la pugna se coló el danés Honoré, y es que el Deceuninck no para de sacar jóvenes talentos. El pelotón entró cinco segundos después, sin distancia entre los favoritos y con un buen noveno puesto de Pello Bilbao. Y al tercer día, el Etna, ya que este lunes se sube al volcán en una subida final en la que habrá cambio de líder, con Thomas ya situado tercero. Sin tiempo de respiro.