La Unión Ciclista Internacional ha dado un paso adelante tras las protestas de los corredores por los graves accidentes que han tenido lugar recientemente en carreras como la Vuelta a Polonia, el Giro de Lombardía o el Criterium del Dauphiné, además de las condiciones mejorables de otras pruebas como el Tour de Valonia.

A través de un comunicado, la UCI celebró el regreso de la competición tras la pandemia aunque lamentó los sucesos que han tenido lugar en estas pruebas. "Aunque los riesgos forman parte de nuestro deporte, la UCI no puede tolerar el hecho de que los accidentes de las últimas semanas han sido, a menudo, el resultado del incumplimiento de las normas de seguridad que se aplican a los ciclistas profesionales. Recientemente se han producido accidentes graves y la UCI es consciente de la insatisfacción de los ciclistas".

La UCI también señala que revisó el reglamento tras los sucesos ocurridos en la Vuelta a Polonia, el Giro de Lombradía, el Criterium del Dauphiné y el Tour de Valonia, además de indicar que la institución "continúa con sus investigaciones y no puede descartar que se apliquen procedimientos disciplinarios", además de asegurrar que "observamos que ciertas medidas de seguridad no se respetan a pesar de la introducción de nuevas medidas".

Por esta razón la UCI ha anunciado que, hasta final de temporada, "reforzará aún más sus inspecciones antes y durante los eventos junto con sus asesores técnicos, con el objetivo de garantizar en la medida de lo posible la máxima seguridad de los deportistas", ademas de enumerar algunas de las medidas que la institución ha tomado en los últimos años como la introducción del clima extremo, el nombramiento de asesores técnicos, publicación de directrices para la circulación de los coches en las carreras o la apertura de procedimientos disciplinarios hacia aquellos que ponen en riesgo a otros ciclistas.

La UCI también anuncia que "ha decidido iniciar una reforma de gran alcance de las condiciones de seguridad junto con los corredores, equipos y organizadores", apuntando que estas reuniones ya están en marcha con la valoración de la situación actual y el debate sobre la introducción de nuevas tecnologías. Una de estas nuevas medidas podría ser "un sistema reforzado de sanciones en caso de incumplimiento de la normativa".

El presidente de la UCI, David Lappartient, también habló sobre este tema. "La seguridad de los ciclistas es una prioridad para la UCI, que considera este tema como muy importante. Somos conscientes de las preocupaciones de los ciclistas sobre las condiciones de seguridad en su trabajo y estamos decididos a tomar más medidas para darles una respuesta sólida y adecuada".