En pleno Tour de Francia, y ante una golosa contrarreloj en Pau, Rohan Dennis tomó la decisión abandonar, sin previo aviso al equipo y sin motivo aparente. El campeón del mundo de esa especialidad alegó "malas sensaciones" durante la ronda gala, pero desde el pelotón se pensó que se bajó de la bici para no acumular fatiga y para prepararse a conciencia de cara a los Mundiales de Yorkshire.

Pues bien, esta polémica retirada ha tenido consecuencias. El Bahrain-Merida ha rescindido el contrato de Dennis de forma unilateral. El anuncio oficial ha tenido lugar hoy, justo al término de los Mundiales, "para no entorpecer la actuación" del que fuera su corredor; sin embargo, la ruptura del contrato ya le fue comunicada al australiano el pasado 13 de septiembre.

La desavenencias entre ambos parecían evidentes. Nada más llegar a la meta de Bagnères-de-Bigorre, el día del abandono, Dennis se dirigió al bus del equipo para hablar con sus dirigentes. Salió con gesto contrariado y con cara de notable enfado. No quiso hacer declaraciones, pero sí se paró con los medios Gorazd Stangelj, técnico del Bahrain: "No quiso hablarnos. Se bajó en el avituallamiento y pasó de nosotros. Albergábamos esperanzas para la crono de Pau", subrayó.

En los Mundiales, donde Rohan volvió a coronarse, por segunda vez, como el hombre más rápido contra el crono, compitió con una BMC Timemachine, en lugar de la Mérida, propia del conjunto pérsico. Hace unas semanas Dennis apuntó que esperaba seguir entre las filas del Bahrain en la temporada 2020, pero no será así. Tendrá nuevo destino, a menos que la Junta Arbitral de la UCI, a quien ha referido la rescisión de contrato, diga lo contrario.