Llegan los Pirineos al Tour con el Tourmalet y Prat d'Albis
El tríptico pirenaico, con la llegada a Bagnères-de-Bigorre y los finales en alto en el Tourmalet y Prat d'Albis, y la crono de Pau, son las grandes citas de la semana en el Tour.
Después de una merecida jornada de descanso tras una primera semana del Tour de Francia marcada por la subida a La Planche des Belles Filles y los abanicos camino de Albi, los ciclistas empezarán a sufrir la dureza de las montañas en esta segunda semana con las duras jornadas de los Pirineos además de afrontar la única contrarreloj individual de esta edición en Pau.
Etapa 12: Toulouse - Bagnères-de-Bigorre (jueves 18 de julio)
Tras una jornada ideal para los esprinters camino de Toulouse, llegan los Pirineos y lo hacen con una etapa de 209,5 kilómetros entre Toulouse y Bagnères-de-Bigorre. Tras un inicio de jornada a priori sencillo con la Côte de Montoulieu-Saint-Bernard (4ª, 1,7 km. al 5,2%) como principal dificultad, la carretera irá picando hacia arriba camino del esprint intermedio de Bagnères-de-Luchon, donde empezará el tramo más duro de la etapa con la subida al Col de Peyresourde, de primera categoría con sus 13,2 kilómetros al 7% que romperá el pelotón. Tras su bajada y una zona favorable camino de Guchen, los corredores subirán a la Hourquette d'Ancizan, de primera categoría con sus 9,9 kilómetros al 7,5% y que contará con bonificaciones en su cima antes de afrontar un largo descenso de casi 30 kilómetros hasta la meta de Bagnères-de-Bigorre.
Etapa 13: Pau-Pau (viernes 19 de julio, C.R.I.)
Con la fatiga de las primeras montañas pirenaicas aún en las piernas, los corredores harán frente a la única contrarreloj individual del Tour, con u recorrido de 27,2 kilómetros con salida en Pau. No será una crono llana, ya que en los primeros 8 kilómetros subirán el repecho de Cériset y posteriormente la Côte d'Esquillot antes de afrontar un tramo final más llevadero por Jurançon antes de la llegada a meta.
Etapa 14: Tarbes - Tourmalet (sábado 20 de julio)
Tras la crono los Pirineos llegan en su máximo esplendor en una jornada corta pero muy intensa de 117,5 kilómetros entre Tarbes y la llegada en alto al mítico Tourmalet. Los primeros kilómetros tendrán la Côte de Labatmale (4ª, 1,4 km. al 6,7%) como principal dificultad antes de llegar a Ferrières para afrontar la subida al duro Col du Soulor, de primera categoría con sus 11,9 kilómetros al 7,8%. Un tramo de descenso y una zona favorable llevará a los ciclistas camino del sprint intermedio de Pierrefitte-Nestalas antes de que la carretera pique hacia arriba camino de Luz-Saint-Sauveur, donde comenzará la subida final al Tourmalet, primer puerto Hors Categorie del Tour 2019 con sus 19 kilómetros al 7,4% y tres kilómetros finales que oscilan entre el 7 y el 11% antes de la llegada a la cima.
Etapa 15: Limoux - Foix-Prat d'Albis (domingo 21 de julio)
El tríptico de los Pirineos se cerrará con una exigente jornada de 185 kilómetros entre Limoux y la llegada en alto al inédito Prat d'Albis, en Foix. El inicio de la etapa puede permitir la formación de fugas con varios repechos y la subida no puntuable al Col des Tougnets y la ascensión al Col de Montségur (2ª, 6,8 km. al 6%). Desde aquí rodarán por un tramo favorable camino del esprint intermedio de Tarascon-sur-Ariège antes de llegar a Vicdessos, donde empezará la subida al Port de Lers, de primera categoría con sus 11,4 kilómetros al 7%. Tras un rápido descenso hacia Massat, los corredores ascenderán otro duro puerto pirenaico, el Mur de Péguère, de primera categoría con sus 9,3 kilómetros al 7,9% y 3 kilómetros finales con rampas de hasta el 18% que repartirá bonificaciones en su cima. Un larga bajada llevará a los ciclistas a Foix antes de iniciar la subida final al novedoso Prat d'Albis, de primera categoría con sus 11,8 kilómetros al 6,9% con zonas en el tramo intermedio de hasta el 10-11% que podrían descolgar a algún favorito.