Ciccone: "Perdí una etapa, menos mal que soy líder"

Giulio Ciccone estaba “muy triste” al cruzar la meta de La Planche des Belles Filles: “Perdí una ocasión magnífica de conseguir una victoria en el Tour de Francia, en una ascensión de caché. Teuns me reventó en las rampas finales, sólo me quedó felicitarle”. No contaba el italiano del Trek, de 24 años, con alcanzar el maillot amarillo: “Los favoritos venían muy rápido por detrás y yo terminé muy lento por delante. Descarté la idea. Cuando me comunicaron que superaba por seis segundos a Julian Alaphilippe, que encima había atacado, no me lo creía. Convertirse en líder del Tour se sueña de pequeño, pero no esperas lograrlo. Lo logré”.

El prometedor abruzzese se exhibió en el pasado Giro. Conquistó la maglia de mejor escalador y un triunfo en Ponte di Legno, la segunda muesca en la carrera de su país tras la que sumó en la edición de 2016, en las filas del Bardiani: “Cuando pensabas que tu temporada no podía ir a más, resulta que sí: primero en el Tour después de seis jornadas”. Eso sí, Ciccone sabe cuál es su misión estas tres semanas: “Aunque portar esta prenda me enorgullece, debo trabajar para Porte y para Mollema”.

Comparte apellido con Madonna (Madonna Louise Veronica Ciccone) y muchas veces le han preguntado sobre un posible parentesco. “Qué va, llamarse Ciccone en Italia me parece algo muy común. Por si en algún momento se entera de mi existencia y lee acerca de mí, que sepa que me gusta mucho su música”, confiesa entre risas.

Para seguir con el juego de palabras, el Tour tituló su crónica Like a virgin. Por la dramática historia de La Planche des Belles Filles (las jóvenes de Plancher-les-Mines se suicidaban para no que no les violaran durante la Guerra de los 30 Años) y por los estrenos de Ciccone como líder de la ronda y de Dylan Teuns como ganador en una grande. El belga del Bahrain, de 27 años, se impuso en las rampas más duras “al estilo de Purito Rodríguez”. El catalán ejerce como mentor y embajador del equipo del Golfo Pérsico, y su impronta cuaja: “Me encantan los porcentajes elevados, como los muros en los que vencía Joaquim. Conseguir mi primera victoria en la cita más importante me transforma en la persona más feliz del mundo. Y además mi pareja se encontraba aquí para recibirme y celebrarlo en la llegada”.