Grave lesión de Jorgenson en Roubaix por un freno de disco
El corredor estadounidense sufrió un corte de 4 centímetros de profundidad en su pierna derecha mientras disputaba la clásica francesa en categoría sub-23.
La polémica con los frenos de disco no cesa. El peligro que entrañan en competición sigue latente cuando cada vez son más los equipos que instalan este componente en sus bicicletas dentro del ciclismo profesional. El último corredor en salir malparado por los frenos de disco ha sido Matteo Jorgenson, durante la disputa de la París-Roubaix Espoirs celebrada el pasado 2 de junio.
El joven estadounidense de 19 años, que corre en categoría sub-23 con el equipo continental Jelly Belly, abandonó la prueba con una grave herida en la pierna, producida por el corte del freno de disco de otro corredor que chocó contra él. Tal y como informó el portal Cyclingnews, Jorgenson fue trasladado rápidamente al hospital de Cambrai para ser intervenido de urgencia ya que su pierna derecha presentaba un corte de 4 centímetros de profundidad.
Pocas horas después, el propio Jorgenson compartió sus redes sociales las terribles consecuencias del accidente y criticó el uso de los frenos de disco: "No creía que los frenos de disco pudieran hacer esto hasta que me ha pasado. Cuando me levanté, vi el [freno de disco] trasero [del otro ciclista] y mi botín completamente empapados de mi sangre. Nada más podría haber hecho un corte tan limpio y con cuatro centímetros de profundidad".
Fran Ventoso ya se vio afectado en 2016
No es el primer caso en el que un ciclista profesional sufre graves daños por la acción de un freno de disco. En el año 2016, en la categoría élite de París-Roubaix, Fran Ventoso (ciclista del CCC) sufrió un terrible corte en la tibia que le obligó a pasar por el quirófano. Al igual que Jorgenson, Ventoso criticó duramente el uso de los frenos de disco en el ciclismo por el peligro que conllevan en accidentadas carreras como la París-Roubaix. "Los discos nunca deberían haber llegado al pelotón profesional, al menos como los conocemos hasta este momento. Al menos hasta que cuenten con sistemas de protección y seguridad que no los conviertan en auténticos cuchillos instalados en las bicis", explicó el entonces corredor del Movistar.
La UCI aprobó la utilización de frenos de disco en el pelotón a finales de 2015, y desde entonces han sido foco de constantes polémicas. En 2016, a causa de problemas como el de Ventoso, la UCI decidió prohibir su uso, pero éstos terminaron reestableciéndose en el pelotón a principios del año siguiente. En la actualidad, este sistema es una sólida apuesta de las marcas de bicicletas, por lo que parece que los corredores seguirán saliendo perjudicados. Cada vez son más los equipos profesionales que han introducido discos en su sistema de frenado, tales como Bora-Hansgrohe, Deceuninck-QuickStep o Katusha (los usa desde esta temporada), entre otros. Los discos seguirán dando de qué hablar...