Alaphilippe volvió a exhibirse en el muro de Huy; Valverde, 11º
Julian Alaphilippe ganó por segundo año consecutivo la Flecha Valona. Fuglsang fue segundo y Ulissi, tercero. Valverde, en cabeza toda la carrera, se quedó atrás al sprint.
Tuvo que tirar del último golpe de riñón para asegurar su victoria, pero Julian Alaphilippe volvió a exhibirse en el muro de Huy. El francés ganó su segunda Flecha Valona consecutiva (primer francés que lo logra). En la primera derrotó en un mano a mano al rey de la carrera, Alejandro Valverde (finalizó 11º), en 2019 le tocó bregar con Jakob Fuglsang, quien está siendo uno de los animadores de todas las clásicas (junto con Alaphilippe y Van der Poel, quién no estuvo porque su equipo no fue invitado). "Pasó más tiempo con Fuglsang que con mi familia", bromeó el vencedor tras cruzar la meta. Y es que el duelo entre ambos está siendo un clásico esta primavera.
En la Flecha el ciclista del Astaná fue el encargado de endurecer el último medio kilómetro, el del Deceuninck se pegó a su rueda, eligió su distancia y atacó a falta de 200 metros. Le sobrepasó fácil, pero a Fuglsang le quedaba el último repris y se vació en los metros finales. No fue suficiente y el primer cajón del podio recibió al mismo inquilino: Julian Alaphilippe. El francés se aprovechó del gran trabajo de un español, Enric Mas. El balear fue el encargado de neutralizar a Marczynski y Mohoric, quienes intentaron animar en el rus final. A falta de 6,5 para meta les cazó y puso un ritmo infernal para seleccionar el pelotón. Algunos favoritos como Sagan y Adam Yates (por caída) ya se habían quedado, otros fueron cediendo comba.
A Mas le sacó de ahí Rui Costa, que fue el primero en endurecer el ritmo al comenzar la ascensión final a Huy. Fue una aparición breve, pues Poels puso a Kwiatkowski en cabeza a los pocos segundos, pero acabó sobrepasado cuando el ritmo subió con Fuglsang. Diego Ulissi, que supo aguantar bien en la parte alta del pelotón, acabó tercero. En esa posición también estaba Alejandro Valverde, quien había estado bien colocado toda la jornada y el Movistar trabajó para él, pero el día antes de cumplir 39 años no se pudo autoregalar su sexta Flecha Valona. Fue undécimo, pero sus sensaciones fueron mejores que en la Amstel Gold Race el pasado domingo (sufrió una pájara y quedó fuera del top50), y es optimista de cara a la Lieja-Bastoña-Lieja (28 de abril).