Ricardo Ten, de laureado nadador a campeón del mundo de ciclismo en pista

Hay lugares que nos marcan y Río siempre tendrá un significado especial para Ricardo Ten (Valencia 11 de agosto de 1975). Allí, en los últimos Juegos Paralímpicos de 2016, se dio cuenta de que algo había cambiado. Tras más de dos décadas en la élite de la natación, su motivación ya no era la de antaño, por lo que cobró fuerza su idea de buscar un nuevo camino para recuperar aquella ambición que se había ido escapando. Fue entonces cuando el ciclismo, que siempre estuvo ahí, en silencio pero a su vera, se convirtió en su nuevo reto. La bicicleta había acompañado al valenciano como aficionado, en sus pretemporadas antes de competir en la piscina e incluso en triatlones populares. Ahí, en Río, en el Mundial de ciclismo en pista adaptado que finalizó este domingo, ha demostrado que 'su conversión' se ha llevado a cabo con éxito y en un tiempo récord. Así lo acreditan su oro en la prueba de persecución individual de 3 kilómetros (3:52.222) y su bronce en la del kilómetro contrarreloj (1:17.276). Dos metales en apenas ocho horas y prácticamente un año después de que empezara a entrenar sobre dos ruedas. Además, conquistó un meritorio quinto puesto en scratch, a pesar de haber sufrido una caída.

Su entrega, su tesón, su superación... es algo inherente a Ricardo Ten desde que era sólo un niño. Con 8 años sufrió un accidente eléctrico, mientras jugaba con su primo, que le provocó la amputación de ambos brazos y la pierna izquierda, así como quemaduras en el 75% de su cuerpo. Nueve meses en el hospital en los que no dejó de estudiar ni de soñar con la bici. Algo que, a posteriori, volvería a tener relevancia. El deporte se convirtió, cada vez con más fuerza, en un estímulo imprescindible en su vida y probó diferentes disciplinas hasta que la natación llegó para quedarse. Su primer campeonato fue el Europeo de Perpignan (Francia) de 1995 y los éxitos se empezaron a suceder hasta el punto de que el valenciano posee más de cien títulos como Campeón de España, 13 de Europa, 7 del mundo y 3 oros en los Juegos Paralímpicos (además de una plata y tres bronces). A eso habría que sumar los quince años en los que ha estado en posesión del récord del mundo de 100 metros braza clase SB4 (de 1997 al 2012). De esta forma se podría afirmar con rotundidad que Ricardo Ten ha sido uno de los nadadores paralímpicos más prolíficos de la historia.

Pero esa historia de más de 20 años en las piscinas tocó a su fin. Y con estas palabras, Ricardo Ten se despedía de la natación. "A ella se lo debo todo. Me ha enseñado a sufrir, esforzarme y levantarme después de caerme. Me ha enseñado qué es la constancia, el sacrificio, pero sobre todo a disfrutar con lo que haces", confesó en sus Redes Sociales. Su retirada en 2017 vino de la mano de otro importante anuncio: su paso al ciclismo adaptado a los 42 años. Una disciplina nueva en la que ya consiguió hace meses un bronce en la Copa del Mundo de Emmen (Holanda) y una plata en el Mundial de carretera de Pietermaritzburg (Sudáfrica) y ahora añade estas dos últimas medallas en Río --metal que se le resistió en los Juegos, en natación--. El valenciano ya mira por el rabillo del ojo a la próxima cita, el Mundial de ciclismo en ruta que se disputará en Italia el próximo mes de junio porque si por algo se caracteriza es por su trabajo, su humildad... valores que transmite en sus conferencias y que le han hecho salvar también los obstáculos de su día a día. La frase "Si se sueña se puede" es su leitmotiv y ya ha demostrado que él nunca deja de soñar.

También David Casinos se reinventa

El caso de Ricardo Ten no es un hecho aislado. Otro ilustre deportista paralímpico David Casinos (Valencia, 15 de febrero de 1972) también se ha reinventado y ha cogido la bicicleta después de aparcar el atletismo. En peso se hizo con el oro en los Juegos de Sidnei, Atenas y Pekín, mientras que en disco consiguió un oro en Londres y un bronce en Río, encadenando así cinco medallas consecutivas. Hoy por hoy su meta pasa por competir en los próximos Juegos de Tokio 2020, eso sí, ahora en la modalidad de ciclismo en pista. De momento, ya está en camino.

Cinco medallas para España

España cerró el Mundial de Río de Janeiro con cinco medallas. Dos oros para Alfonso Cabello (Kilómetro contrarreloj MC5) y Ricardo Ten (Persecución C1), una plata para Ávila y Font (Persecución MB) y dos bronces, uno de Ricardo Ten (Kilómetro contrarreloj C1) y el otro, del equipo de velocidad M1-5.