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CICLISMO | VUELTA A ANDALUCÍA

"El caso de Froome trata de sus inhalaciones, no de un positivo”

David Brailsford, mánager del Sky, desvía el debate de la investigación desde el positivo a la cantidad de veces que Froome utilizó su inhalador.

Alcalá de Guadaíra
"El caso de Froome trata de sus inhalaciones, no de un positivo”
Dani Sánchez

Casi una semana bajo lupa y en exposición a las preguntas de los medios de comunicación dan para mucho. Chris Froome y el Sky se han visto asediados en salidas y metas de la Ruta del Sol. El mensaje principal quedó claro antes de que el pelotón tomara la salida de la ronda en Mijas: “Creemos en Chris, le apoyamos. Puede correr, no rompe ninguna norma y merece un proceso justo”. Froome no se ha salido del guion durante las tres etapas que llevamos.

Los compañeros se han expresado en una línea similar. David de la Cruz: “Nada le impide estar aquí. Resulta duro que todo gire en torno a la misma circunstancia cuando se encuentre en un proceso y está en disposición de competir. No hace nada malo”. Philip Deignan: “Pienso que se trata de un error acosarle así, y me parece mal que se le cuestione cuando no ha cometido una infracción. Nos dedicamos a nuestro trabajo y no nos afecta el ruido mediático”.

Froome dobló la tasa permitida para el salbutamol, pese a su exención médica. Con un análisis y un contraanálisis positivo, participa en Andalucía por la clasificación del salbutamol como un producto específico, que no conlleva suspensión cautelar. Sin embargo, tanto Froome como el Sky insisten en una importante equivocación: “No es una sustancia prohibida”. Sí lo es. Recogida por el Código de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), y por eso se expone a una sanción de dos a cuatro años si no demuestra su inocencia en la investigación de la Unión Ciclista Internacional (UCI).

David Brailsford, mánager del equipo, incluso ha desviado el debate del positivo, lo que sugiere la invalidez de la prueba principal del sistema antidopaje: “Cojamos perspectiva. No se trata de la cantidad registrada en la orina (ofreció 2.000 nanogramos, y se estipulan 1.000), sino de las veces que usó su inhalador. Se permite utilizarlo en 16 ocasiones en 24 horas, con el umbral de 1.600 microgramos por inhalación. Analizamos entonces si sobrepasó ese límite, y no lo hizo”.

La UCI estudiará este argumento y otros, como el fallo renal puntual, que llevó a Froome a una excreción de salbutamol superior a la del resto de la Vuelta: no tuvo problemas en ningún otro control. No obstante, los expertos médicos y jurídicos consultados por As confirman que alegar causas externas para justificar el positivo supone un riesgo demasiado grande, ya que resultará muy difícil probar la teoría. De cualquier forma, el mundo del ciclismo se halla expectante ante una resolución que desde el Sky minimizan: “No debe considerarse un asunto de dopaje”.