La etapa del día: el podio del Tour se decide en 29 segundos
Froome aventaja a Bardet en 23 segundos y a Urán en 29. Mikel Landa, cuarto a 1:36, se descarta para subir al podio de París este domingo.
Chris Froome puede sentenciar hoy su cuarto Tour en la contrarreloj de 22,5 kilómetros en las calles de Marsella. Con salida y meta en el Vélodrome, se trata de un trazado llano… pero con un muro de 1,2 km al 9,5% a siete de la llegada. Esa pequeña dificultad, Nuestra Señora de la Guardia, romperá el ritmo y preocupa a los corredores que optan al podio. Froome defiende 23 segundos sobre Romain Bardet y otros 29 respecto a Rigoberto Urán. Mikel Landa, a 1:36 como cuarto de la general, no se considera candidato al cajón de París.
El defensor del título señala a Urán “como la principal amenaza”. Desde 2010, Urán y Froome se han enfrentado en 14 ocasiones. El británico superó al colombiano en ocho, mientras Urán batió a Froome en cinco y en otra acabaron en el mismo tiempo. Sobre Bardet domina 11-2. El francés, un escalador puro, se resignó en la cima del Izoard a ceder la segunda plaza contra Urán: “En la crono no confío demasiado, aunque daré el máximo”.
Por su parte, Urán reconoce afrontar “la oportunidad de toda una vida”: “Durante estas tres semanas quizá me he encontrado en la mejor forma de siempre. Simplemente, debo dejarme hasta la última gota de energía. Froome parte con ventaja, pero veremos”. El líder de la ronda gala asume su favoritismo: “Me noto listo para vencer en mi cuarto Tour. Creo en mí”.
Mikel Landa, cuarto a 1:36, está a 1:07 de Urán y a 1:13 de Bardet. “Demasiadas diferencias”, asume con pesar. Las dos etapas alpinas le han fatigado y le han producido un sentimiento de tristeza. Seguramente se marchará con las manos vacías, a un paso del podio: “Me cuesta comprobar que no habrá premio para mí”. No obstante, pretende pelear para redondear “un gran Tour y por si salta la sorpresa”: “Tampoco imaginé rendir a un nivel tan alto”. Dispone de 19 segundos ante un tocado Fabio Aru.