Aru: "No me asusta competir cara a cara contra Froome"

-Inauguró su palmarés en el Tour con un triunfo de mucho mérito.

-Viví una sensación increíble desde que ataqué: constaté que abría hueco, fui bien, vencí y disfruté de mi primera victoria en el Tour con el maillot de campeón de Italia. Supuso una explosión de felicidad inmensa. Tenía parciales en el Giro y la Vuelta, me faltaba en el Tour. Me enorgullece ganar de la misma manera, con la tricolor, que Vincenzo Nibali en 2014, un amigo y mentor. El éxito va para todo el Astaná, porque sufrimos tiempos difíciles, y a la familia de Michele Scarponi. Seguro que desde el cielo me empujó hacia la meta.

(Fabio Aru, sardo de 27 años, se convirtió en el 87º corredor de la historia en anotarse una etapa en las tres grandes rondas: Giro -tres-, Vuelta -dos- y Tour -una-).

-Su excelente subida a La Planche des Belles Filles lleva a pensar en usted como un candidato para la general.

-De momento no pienso en conquistar la clasificación. Sky siempre está muy fuerte en el Tour. Veremos cómo se desarrolla la carrera en la última semana. Por mi parte, me planteo día a día la competición, sin presión.

-¿Mantendrá Astaná la apuesta por una doble baza, Fuglsang y usted, o ya es el capo único?

-Jakob se encuentra muy cerca del top-ten (15º, a 1:33). Se comprobará cómo evoluciona la carrera, aunque nos parece mejor contar con dos opciones.

-¿Se nota más fresco después de perderse el Giro por lesión?

-Sí, está claro. Sin embargo, me dolió más no disputar la carrera de casa. Con el infortunio de quedarme fuera me desanimé bastante. Recibí un palo muy duro y me emocioné durante la presentación oficial. Se trataba de la gente de mi Cerdeña natal, ¡qué mal trago!

(Aru se cayó en abril en un entrenamiento en Sierra Nevada y no pudo tomar la salida en su Cerdeña natal en la edición número cien del Giro).

-Tercero, a 14 segundos de Froome. ¿Cómo se planteará ahora su estrategia?

-Con los pies en la tierra. Compito en mi segundo Tour, pienso que aprendí de los errores de 2016. No me asusta combatir en un cara a cara contra Froome, como demostré en la Vuelta de 2014. Ofreceré el máximo en cada jornada.