Vuillermoz gana en el Muro de Bretaña y Nibali flaquea

Alexis Vuillermoz, un corredor procedente del mountain bike, de 27 años, logró la mejor victoria de su carrera y la primera del ciclismo francés en el Tour 2015, al imponerse en el Muro de Bretaña. Vuillermoz aventajó en 5 segundos al irlandés Dan Martin y en 10” a un ramillete de favoritos, que encabezó Alejandro Valverde. En ese grupo no viajaba el vigente campeón de la Grande Boucle, Vincenzo Nibali, que cedió 10 segundos con sus rivales, una diferencia no muy relevante en la lucha por la general, pero sí sintomática para lo que se avecina a partir del martes: los Pirineos.

El Sky tomó el control en el inicio de la subida, donde Vuillermoz ya cogió unos metros junto a Simon Yates y Simon Geschke. El propio Chris Froome, envuelto en su maillot amarillo, con Purito Rodríguez pegado a su rueda, se encargó en primera persona de neutralizar la distancia. Pero el francés del Ag2R contraatacó y ya no volvieron a verle hasta el podio. El equipo Cannondale había trabajado toda la etapa para Dan Martin, un ciclista que se adapta perfectamente a este tipo de llegadas, pero el irlandés entró segundo y malhumorado por la pérdida de la oportunidad.

Esta octava etapa arrancó de Rennes con 185 ciclistas, debido a la ausencia de Luca Paolini, italiano de 38 años, suspendido provisionalmente por la UCI tras su positivo con cocaína en plena carrera. El compañero de Purito Rodríguez en el Katusha, angustiado por la noticia, invadido por el insomnio, pidió disculpas a sus colegas del pelotón y al Tour de Francia en varios tuits escritos en plena madrugada.

Sin Paolini, el pelotón echó a rodar camino de su segunda llegada en alto: el Muro de Bretaña, también conocido como el Alpe d’Huez bretón, aunque nada tiene que ver. La subida de este sábado eran dos kilómetros al 7%, con un único antecedente: la victoria de Cadel Evans sobre Alberto Contador en 2011. En la primera meta en alto de este 2015, el pasado lunes en el mítico Huy, Purito había roto la sequía del ciclismo español que duraba desde el triunfo en Peyragudes de Valverde en 2012. No pudo repetir.

Y como todos los días, hubo fuga tempranera. Sylvain Chavanel, Bartosz Huzarski, Romain Sicard y el insistente Pierre-Luc Périchon se fusionaron en el km 9. Un grupo de 17 corredores atrapó al cuarteto a 69 km de la meta. De ahí salieron luego los dos últimos supervivientes, Michal Golas y Lars Ytting Bak, que tampoco recogieron frutos de su temeridad. A 7 kilómetros de la cima, se acabaron las aventuras. Era el turno de los gallos de pelea: de los cazadores de etapa y de la lucha por la general.

El Tour 2015 culmina este domingo su primer tercio de carrera con una contrarreloj por equipos entre Vannes y Plumelec (28 km). La organización tuvo que pedir un permiso especial a la UCI para celebrar esta especialidad tan tarde, en la novena etapa. Se esperan importantes diferencias en vísperas de la primera jornada de descanso, antesala a su vez de los Pirineos.