Segunda para Fabio Aru y Chris Froome recorta 20 segundos

La Vuelta a España sigue viva. Fabio Aru sumó en Monte Castrove su segunda victoria de etapa, tras la conquistada en San Miguel de Aralar, pero a su rueda entró Chris Froome, que atacó en la subida final y ha arañado 20 segundos a Alberto Contador y a Alejandro Valverde. El líder del Sky ya es segundo en la general a 1:19 del madrileño, a falta de las jornadas de Ancares (sábado) y de la crono de 9,7 km de Santiago (domingo). No se rinde Froome.

El keniano nacionalizado británico está dispuesto a plantar batalla hasta el final. En el sprint de Xoan de Poio, casi en las faldas de la última ascensión, demarró en busca de los tres segundos de bonificación, que sólo fueron dos porque se equivocó de pancarta y Gorka Izagirre le superó. En las primeras estribaciones de Monte Castrove, Froome ofreció la misma imagen que otros días y parecía quedarse cada vez que Contador o Purito Rodríguez apretaban en cabeza. Era un espejismo. El africano estaba fuerte y con ganas de incordiar.

Después de los escarceos iniciales, con gente como De Marchi, Tiralongo, Barguil o Coppel, llegó el momento de la verdad con el ataque de Fabio Aru a 3,5 km. El italiano se marchó por delante y un kilómetro después se le incorporó Froome. Por detrás, el trío de españoles: Contador, Valverde y Purito. Los cinco primeros de la clasificación, en la pomada. La general no engaña. Una vez más, con cada uno mirando por su interés, los españoles no se pusieron de acuerdo en la caza. Contador y Purito intentaban demarrar, mientras Valverde quería subir a ritmo, porque se sabía ganador si se llegaba en grupo. Uno por otro, al final el triunfo se lo llevó Aru, mientras que Froome pegó un mordisco total de 20 segundos.

Las intenciones de los aspirantes al trono de Contador ya se habían visto durante el desarrollo de la etapa. La escapada del día había tardado mucho en hacerse y permaneció en todo momento controlada. El Movistar no estaba por la labor. Sabía que la subida a Monte Castrove era una oportunidad de oro para que Valverde diera una dentellada a la ventaja de 1:36 minutos que le separaba de Contador y a la escasa diferencia de 3 segundos que le sacaba a Froome. Por eso, Luis León Sánchez, embutido en su maillot a puntos azules de rey de la Montaña; Hubert Dupont y Johan Le Bon no pudieron abrir brecha hasta que se habían recorrido más de 50 kilómetros.

En la primera ascensión a Monte Castrove, que se coronaba a 24 km de la meta, el Sky de Froome sustituyó al Movistar de Valverde en la cabeza del grupo principal. Luis León coronó en solitario, con lo que cumplía su objetivo de aumentar en cinco puntos su ventaja al frente de la Montaña. El pelotón cruzó la cima a apenas 18 segundos, con dos ciclistas intercalados: Losada y Le Bon. A 20 kilómetros fueron los tres devorados. Todo se iba a jugar en la subida final. Los gallos no querían intrusos.

Por la mañana, cuatro corredores habían decidido no tomar la salida, dos de ellos con la mirilla puesta en el Mundial de Ponferrada: Fabian Cancellara y Tom Boonen. Tampoco partieron Cameron Meyer y Robert Gesink, que viajó a acompañar a su mujer, con dificultades en su embarazo, cuando ocupaba una digna séptima plaza en la general. Más adelante también se bajó Koen de Kort.