TOUR | 21ª ETAPA
Triunfo de Kittel, susto de Péraud y coronación de Nibali en París
El sprinter alemán del Giant consiguió en la última etapa su cuarto triunfo de la edición. El francés sufrió una caída ya en los Campos Elíseos. Nibali suma su primer Tour.Tour de Francia 2017: Le Puy-en-Velay y Romans-sur-Isère
Marcel Kittel logró su cuarta victoria en este Tour tras imponerse por segundo año consecutivo en los Campos Elíseos, en uno de los triunfos más prestigiosos pero menos publicitarios de la Grande Boucle. En París, los focos están centrados en el podio, en el esplendor del maillot amarillo y en sus compañeros de laureles. En lo más alto, Vicenzo Nibali. A su lado, los franceses Jean Christophe Péraud y Thibaut Pinot.
Pero no se puede decir esta vez que no hubiera sobresaltos en esta festiva jornada de cierre. A 42,5 kilómetros del final, Péraud resbaló en el adoquín parisiense y rodó por los suelos. Alarma. El francés ya tuvo dos caídas el año pasado y tuvo que abandonar con una clavícula rota. Péraud se levantó, no había heridas de consideración. Faltaba por saber si podría enlazar. Normalmente, por tradición, en esta última jornada no hay hostilidades entre los hombres de la general. Movistar no aprovechó la ocasión para aupar a Valverde. Lógico. Incluso se vio a Nibali ponerse en cabeza para frenar el ritmo del pelotón, aunque un ciclista del Sky y otro del Cannondale que iban en punta no le hicieron mucho caso. Péraud remontó entre los coches, sin que la televisión ofreciera muchas imágenes, y no tardó mucho en reincorporarse. Sólo fue un susto.
París coronó a Nibali, que entra así en el selecto club de corredores que han ganado las tres grandes rondas: Vuelta, Giro y Tour. Antes que el ‘Tiburón del Estrecho’ lo hicieron Jacques Anquetil, Eddy Merckx, Felice Gimondi, Bernard Hinault y Alberto Contador. Calidad rebosante. Se trata de la décima victoria italiana en la ronda francesa, tras las conquistadas por Ottavio Bottechia (dos: 1924 y 25), Gino Bartali (dos: 1938 y 48), Fausto Coppi (dos: 1952 y 49), Gastone Nencini (1960), Gimondi (1965) y Marco Pantani (1998). Sus 7:52 minutos sobre Péraud suponen también la mayor diferencia desde 1997 (Ullrich aventajó en 9:09). Son solo datos, pero detrás de la frialdad de estos números asoma la grandeza de Nibali. Un gran campeón para el Tour.
Junto a él estuvieron Péraud y Pinot, que recuperan la esperanza para el ciclismo francés. El último corredor que subió al podio fue Virenque (1996 y 97). Y para encontrar a dos hay que remontarse a Fignon e Hinault (primero y segundo) en 1984. Péraud es un caso peculiar: un veterano de 37 años que ha llegado tarde a la ruta, porque su especialidad era el mountain bike. A pesar de su edad, no está castigado. Pinot, sin embargo, sí representa el futuro a sus 24 años, dentro de una brillante generación en la que también destacan Bardet (sexto en este Tour), Barguil (correrá la Vuelta, donde en 2013 ganó dos etapas) o los sprinters Bouhanni y Demare.
Y mientras que Francia emerge, España se va del Tour por segundo año consecutivo sin ninguna victoria de etapa. En 2013, Purito Rodríguez ocupó la tercera plaza del podio, pero Alejandro Valverde, cuarto, no pudo emularle en esta 101ª edición. La retirada de Alberto Contador por una caída dejó al murciano como la gran baza española. Valverde peleó con honor, pero acabó agotado, exprimido, roto… Fue penando por los Pirineos y terminó de hundirse en la contrarreloj. Quienes le derrotaron fueron mejores. C’est le Tour.