TOUR | 2ª ETAPA
Nibali da primero: ya es el líder
El italiano supo manejarse bien en los kilómetros finales y sorprendió a sus rivales en Sheffield. Sacó dos segundos al pelotón. Contador ofreció muy buenas sensaciones.
El campeón de Italia, Vincenzo Nibali, se llevó la primera pelea entre los gallos del Tour de Francia, en un trazado con aroma de clásicas. Atacó Contador. Atacó Froome. Atacó Sagan. Pero el demarraje triunfal fue del ‘Tiburón’, que lanzó su mordisco a dos kilómetros y venció en solitario. Nibali arrebata así el maillot amarillo a Marcel Kittel, que entró muy descolgado.
La etapa presentaba un recorrido que recordaba a las clásicas de las Ardenas. Una ‘Lieja británica’ con nueve cotas puntuables (cinco de tercera, tres de cuarta y una de segunda), más de 3.000 metros de desnivel y una rampa del 30% a cinco kilómetros de la meta. La cautela de los favoritos se notaba en imágenes como ver a Contador en cabeza de carrera a 85 km de Leeds. Por si acaso.
El primer gallo que rompió la tregua fue Rolland, que se marchó con el también francés Peraud en la penúltima cota del día, Oughtbridge. Sin entendimiento en los relevos, las imágenes de televisión mostraban a Rolland abroncando a su compatriota, que continuó sin ganas de colaboración. El líder del Europcar decidió entonces marcharse en solitario. A 8 km, antes de iniciar la última subida a Jenkin Road, ya había sido atrapado. Calentón estéril.
Los líderes se dirigían con las orejas tiesas al punto más caliente de la etapa. Ya en Jenkin Road, a 5,5 kilómetros, arrancó Alberto Contador: hasta dos veces. Le respondió Nibali. Froome iba delante, pero tardaba en reaccionar. Para despejar las dudas, lanzó también su ataque en la parte final de la subida, que coronó en primera posición. Tampoco abrió hueco. Ni lo hizo Sagan cuando se marchó en la bajada. Todo apuntaba a que Valverde y el eslovaco se iban a jugar la etapa al sprint, pero el incorformista Nibali probó suerte y cantó bingo.
Antes de que comenzara la tensión final, el Sky se llevó un buen susto con Richie Porte, el lugarteniente de Chris Froome, que sufrió una caída a 65 km de la meta. Llegó a acumular un retraso de un minuto y medio, pero finalmente se reincorporó al pelotón con el codo izquierdo visiblemente dañado.
Igual que el día anterior, la escapada de la jornada se fraguó muy pronto. Seis corredores atacaron en el km 1: Kadri, Fonseca, Quemeneur, Busche, Lemoine y el español David de la Cruz, un sabadellense de 25 años debutante en el Tour con el equipo NetApp. En el km 12 se incorporó De Clercq. Y los siete alargaron su aventura hasta donde pudieron. A 60 km solo sobrevivía el francés Kadri, que fue absorbido a 36 de la meta de Sheffield.