Poker del intratable Cavendish

Mark Cavendish se llevó en Cherasco su cuarto triunfo en este Giro, el 101 según sus cábalas y la UCI, aunque algunas estadísticas le dan más. Después de haber dispuesto de un tren de garantías en los dos anteriores, el Manxman se buscó la vida de nuevo solo, agazapado y con una magnífica remontada, como en la etapa inaugural.

Tras mantener un vibrante pulso con sus socios de escapada y el pelotón, Pablo Lastras tuvo que dar su brazo a torcer a siete km de la meta, con 226 de duro trabajo en las piernas. El madrileño del Movistar, de 37 años, se filtró en la fuga del día y se marchó en solitario en la bajada de Tre Ceni, con 30 km todavía por cubrir. Superadas varias escaramuzas y ataques que no fructificaron, Cannondale condujo al grupo para Viviani, pero al italiano aún le falta mucho para poder discutir las victorias a Cavendish, posiblemente el mejor velocista de la historia, a pesar de su carácter.

Lastras se fracturó clavícula y cuatro costillas cuando marchaba escapado en la sexta jornada de la edición de 2012, en el Passo della Cappella. La trayectoria de este cazaetapas ha transcurrido salpicada de lesiones, sacrificio y grandes éxitos: cuenta con tres triunfos en la Vuelta, uno en el Tour y otro en la Corsa Rosa.

No tomaron la salida los vigentes campeones de Giro, Ryder Hesjedal, y Tour, Bradley Wiggins. Según los comunicados de sus equipos, el primero abandona con un virus; el segundo, con una infección pulmonar. Hesjedal no llevaba mala carrera hasta que reventó. En cambio, Wiggins nunca dio con el golpe de pedal, se cayó y sufrió muchísimo con la lluvia y los descensos. Veremos cómo enfocan la temporada, ya que para ambos la ronda italiana era el objetivo principal de 2013. Y, sobre todo, cómo gestiona Sky la convivencia entre el Sir y Froome.