STRADE BIANCHE
Valverde vuelve a correr en Italia después de su sanción
El murciano disputa hoy la Strade Bianche, una joven clásica sobre tramos de tierra. Desde que el CONI le suspendió, Valverde no había competido en Italia.
El 28 de septiembre de 2008, en el Mundial de Varese, Alejandro Valverde disputó su última carrera en Italia: acabó 37º, a 4:53 del vencedor, Alessandro Ballan, tras un ridículo colectivo de la Selección. El Comité Olímpico del país transalpino (CONI) le castigó con dos años sin poder competir en su territorio en mayo de 2009.
Este organismo accedió a la bolsa de sangre número 18 de la Operación Puerto, con nombre en clave Valv.Piti, mediante una comisión rogatoria. Posteriormente cotejó su ADN con un análisis tomado en el Tour de 2008, cuando la 15ª etapa llegó a Prato Nevoso. Resultado: coincidencia total y suspensión. Un año después, el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) universalizó su sanción y anuló los resultados que obtuvo también fuera de Italia desde que la inhabilitación del CONI entró en vigor.
Otro lunar: el murciano nunca ha ganado en suelo italiano. Hoy vuelve como uno de los favoritos en la Strade Bianche (Carreteras Blancas), la prueba que pasa por carreteras de tierra en la Toscana.
En total, Valverde y el resto de participantes deberán cubrir 57,2 km de tramos de tierra (sterrato) divididos en ocho tramos. Especialmente exigentes serán los dos últimos, a 19,5 y 13 km de meta, con rampas que alcanzan picos del 18%. Si el pelotón no se ha roto en estos segmentos (cortos, eso sí, de 2,4 y 1,1 km de longitud), la ascensión a la Piazza del Campo de Siena, con porcentajes del 16%, decidirá quién se lleva el triunfo. Y si el líder del Movistar aguanta hasta entonces con los mejores, se encontrará en su terreno de caza más propicio.
Valverde tendrá que vigilar con atención al actual campeón de la Strade Bianche, Fabian Cancellara (también la conquistó en 2008, lleva dos de seis ediciones). El suizo ha anunciado la intención de repetir, aunque su objetivo sea entonarse de cara a las clásicas de primavera. Cadel Evans, otro al que se le da bien la tierra, el voraz Peter Sagan, Lars Boom, Oscar Gatto o Alexandr Kolobnev (ganador de la carrera inaugural, en 2007) competirán por apuntarse esta prueba a la que RCS, su organizador, quiere dar el lustre de la Roubaix, aunque de momento está a años luz.