Un aficionado demanda a LeBron

El morbo generado por los últimos comportamientos que ha tenido LeBron James sigue su curso y hay mucha gente descontenta con su actitud. Concretamente un aficionado anónimo, que ha demandado al Rey al descubrir que no se retiraba tras el mensaje que puso en sus redes sociales anunciando “la decisión de todas las decisiones”. Todo fue una trola incomprensible al hacerse evidente que no era para decir que esta sería su última temporada como profesional. De hecho, lo que hizo fue anunciar su colaboración con una nueva marca de coñac, algo que ha generado muchas críticas hacia su persona. No es la primera vez que pasa y a estas alturas de su carrera al jugador le debe de dar bastante igual. Pero ocurre de todos modos, evidentemente. Y por algo será.

La información, compartida posteriormente por muchos medios de comunicación y a la que se le ha dado mucha bola en redes sociales por su curiosidad, ha sido revelada en primera instancia por el medio amarillista TMZ, que se encarga principalmente de filtrar información ajena al deporte y que ha revelado que el aficionado en cuestión (Andrew García) asegura sentirse “engañado” por su anuncio del coñac en esa supuesta Decision 2.0, que le llevó a comprar dos entradas para el último partido de la temporada, que sería en el mes de abril ante los Jazz. El fanático reclama 856 dólares por daños.

No es el único que está enfadado por lo ocurrido y protagonizado por LeBron, que no es la primera vez que tiene este tipo de comportamientos y está encantado de jugar con la opinión pública, ese lugar en el que se ganan y se pierden las batallas que deciden las guerras. En este caso hizo, además, alusión a esa The Decision que en 2010 le llevó de Cleveland Cavaliers a Miami Heat, generando así una ristra interminable de críticas que arrastró durante muchos años. Eso sí, su capacidad de resiliencia y sus éxitos en pista consiguieron que la balanza fuera modificada a su favor, por mucho que de cuando en cuando se empeñe en volver a tener actitudes cuestionables.

Y eso es así, por mucho que J.J. Redick tildara de estúpida a la gente que se pensaba que LeBron se iba a retirar. Dillon Brooks, que no deja indiferente a nadie con su carácter indomable, ha dicho que la actitud del Rey es “infantil” y que lo que quiere es estar permanentemente en el centro de atención. Sea así o no, la realidad es que la estrella, que afronta su 23ª temporada como profesional camino de los 41 años y no tiene fecha de retirada, consiguió ser durante unas horas la comidilla de las conversaciones. Algo que, por una razón u otra, pasa con bastante frecuencia. Algún defecto tiene que tener un jugador generacional como él. Lo que no quita que sea uno de los mejores de la historia. O el mejor.

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