Nace la próxima gran estrella: ‘Scoot’ Henderson aterriza en la NBA

El otro gran nombre del draft. Scoot Henderson ha ocupado las portadas y los titulares de las grandes promesas del baloncesto mundial durante las dos últimas temporadas. Su combinación de físico, técnica y mentalidad ganadora le hacen imparable en la pista. Sus armas para hacer daño en ataque son infinitas.

Sin ser un base alto (1′88 metros), domina con el balón en las manos. Su tren inferior, superior al de gran parte del resto del Draft, le permiten pararse en uno o dos tiempos y soltar el lanzamiento desde prácticamente cualquier posición en la que esté. Su especialidad es la media distancia, pero es letal cerca del aro.

Sorprendió y bastante que Charlotte no apostase por él. Portland no se lo pensó. Los Blazers siguen coleccionando talento joven de cara al futuro o, quién sabe, de cara a traspasar para juntar a una estrella con Damian Lillard.

La clave de la explosión, del desarrollo de su juego en los últimos meses ha sido el liderazgo. Ya era el mejor jugador de Ignite con apenas 17 años, poco tiempo después de llegar a por aquel entonces el equipo con sede en Walnut Creek (California). En un vestuario con Jaden Hardy, Dyson Daniels y MarJon Beauchamp como nombres a destacar, él mismo se hizo un nombre.

Su gran punto mejorado la última campaña ha sido la dirección de juego. Su nueva faceta de base organizador, que gana partidos y hace mejores a sus compañeros, le termina de conformar como un jugador total. Sin miedo a nada y con un físico prodigioso, de los mejores de este Draft, el hambre que presenta en la pista es superlativo.

Ese hambre y gen competitivo se vieron en su duelo con Victor Wembanyama el pasado mes de octubre. El jugador de 19 años se fue hasta los 28 puntos y 9 asistencias frente al gigante francés en el primer partido que disputaron en Las Vegas.

Entrando en los puntos a mejorar, a pesar de cada vez tener mayor fluidez tras bote, el lanzamiento lejano sigue siendo su lunar. Un 28% en el triple que no acompaña a los 16,5 puntos que ha promediado durante la temporada regular debe ser su trabajo a mejorar en este verano.

Futura estrella de la liga

En defensa, gran paso lateral para aguantar al atacante, y una facilidad pasmosa tanto para robar balones en líneas de pase como para aguantar el contacto y taponar los lanzamientos cerca del aro. Sus estadísticas de 16.5 puntos, 5.3 rebotes, 6.8 asistencias y 1.1 robos invitan al optimismo con un prospect que promete ser generacional.

Entrando a las comparaciones con jugadores NBA, las expectativas que genera antes de entrar a la mejor Liga del mundo están a la altura de su talento. Un juego similar al del Derrick Rose que llega a los Chicago Bulls en 2008 o al Westbrook que deja UCLA y aterriza en Oklahoma ese mismo año.

Scoot puede aportar puntos y dirección, el escudero perfecto de un Lillard que necesita anotadores de garantías a su lado. Estar con el base puede potenciar su juego sin balón.

Como comentario a su favor, hay que destacar que Henderson, a la sombra de Wembanyama, podría ser número 1 del draft en varias galas de la última década. Sus virtudes superan a las debilidades.