La NBA se frota los ojos con Wembanyama: “¿Qué demonios acaba de pasar?”
Segundo partido de preparación de los Spurs y la incredulidad con el juego del francés no para de crecer. 23 puntos en 23 minutos con jugadas imposibles de imaginar hasta ahora.
Son sólo dos amistosos de pretemporada los que ha jugado Victor Wembanyama, pero las ideas más disparatadas sobre dónde podían estar sus límites como jugador empiezan a convertirse en realidad. El francés, más allá de los números (23 puntos, 4 rebotes, 4 asistencias y 3 tapones en 23 minutos) ha demostrado una vez más que está perfectamente preparado para poner patas arriba la mejor liga del mundo con una serie de recursos nunca vistos antes. Muchos de ellos los puso en práctica en la victoria de su equipo ante los Miami Heat (120-104).
Si en el primer encuentro de pretemporada ante los Thunder Gregg Popovich le usó básicamente de ala-pívot, la posición que parece va a ser habitual para él, hoy se permitió varios experimentos, entre ellos usar al francés muchos minutos de pívot. También salir con Jeremy Sochan (2,06 metros) de base. Y no lo hizo nada mal (10+6+3). Pero volviendo a Wemby, su rendimiento fue igual de bueno que ante los Thunder y no se le vio incómodo ocupando el puesto de 5. Cierto es que los Heat no sacaron a sus titulares ni un solo minuto, pero eso es algo que se te borra de la cabeza rápidamente cuando ves al francés hacer lo que hizo.
Su forma de manejar el balón, de botarlo, de driblar, la quisieran para sí algunos jugadores a los que saca más de 30 centímetros. Su mano desde media distancia, incluso metiendo canastas a la media vuelta, es más que notable (10/15 en tiros de campo y ni mucho menos todos fueron mates). Su capacidad para intimidar, algo que se entendería como lógico si atendemos a sus 2,44 m. de envergadura, se potencia con su actividad defensiva. A ratos es un alero con cuerpo de pívot, otros un escolta machacando el aro casi sin saltar. Es algo nunca visto que va a dejar highlights increíbles noche sí, noche también.
Los dos favoritos ante los Heat los eligen dos de sus compañeros. Tre Jones se queda con un alley-oop en el que él le da la asistencias, aunque no fuese esa su intención inicial. “Yo sólo quería poner el balón lo suficientemente alto como para que sólo él pudiera alcanzarlo, no estaba pensando en un alley-oop”. Pero Wembanyama cogió ese balón a la altura de la línea de tiros libres, según iba corriendo hacia canasta, y se colgó directamente del aro. “Ha sido una locura”, aseguraba Jones.
La otra acción destacada la cuenta Devin Vassell, que acabó con un 6/7 en triples, dos de ellos asistidos por Wemby. Un mate precedido por un eurostep iniciado casi desde la línea de tres puntos. “No ha necesitado casi ni driblar. Va a hacer jugadas todos los partidos en las que nos vamos a quedar pensando ‘¿qué demonios acaba de pasar aquí?”.
Los Warriors derrotan a los Lakers
En el otro partido de la noche los Golden State Warriors visitaban el Crypto.com Arena donde se llevaron su segunda victoria de la pretemporada ante Los Angeles Lakers (125-129), en un encuentro con mayor nivel de baloncesto en la primera mitad, cuando coincidieron en pista LeBron James y Stephen Curry. El primero (12 puntos y 5 asistencias en 18 minutos) no jugó nada en la segunda mitad. El segundo (18+4 en 23), casi nada. En el segundo tiempo, y ya con las estrellas en el banquillo, el protagonismo fue para Austin Reaves en el bando local y Jonathan Kuminga en el visitante. El joven alero de los Warriors fue el mejor (26 tantos) en un encuentro en el que no jugó Usman Garuba por decisión de su técnico, Steve Kerr.
A pesar de la victoria, los Warriors no las tienen todas consigo y hay algunos temas que les pueden dar quebraderos de cabeza. El primero es Chris Paul, el que debería ser el gran fichaje del verano para ellos, para dar la estabilidad necesaria a la segunda unidad. El base, que anoche salió de titular, no recordó para nada a ese jugador que cuidaba la bola como ningún otro. Unos de los líderes a perpetuidad en el ratio asistencias-pérdidas cometió 5 pérdidas en 20 minutos. Algunas fruto del poco tiempo que lleva entrenando con sus nuevos compañeros, pero otras muy poco dignas de un jugador de su nivel.
El otro problema, que si no lo resuelven se puede convertir en crónico, es la defensa. Al descanso ya habían encajado 70 puntos, un equipo que el año pasado tuvo graves problemas defensivos y que acabó con un récord de 11-30 fuera de casa en temporada regular. Es cierto que no está Draymond Green, lesionado, que siempre ha sido el ancla defensiva de este equipo. Pero también es cierto que los Lakers lanzaron con un 54,8% de acierto, un 55,6% desde el triple. Y que los Warriors cometieron demasiadas faltas, algo que también les torturó de vez en cuando el curso pasado. Esta noche, por poner algunos ejemplos, el rookie Tracy Jackson-Davis hizo 4 faltas en sus primeros dos minutos en cancha tratando de defender a Anthony Davis. Pero también veteranos como Paul (4 en 20 minutos) o Kevon Looney (3 en 11) sumaron en una estadística claramente negativa para ellos y que permitió a los Lakers lanzar 11 tiros libres más.
Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todas las claves deportivas del día.