El gesto de Brandon Miller saca los colores al baloncesto universitario
“No volverá a ocurrir, es inapropiado”, asegura el entrenador de Alabama. Miller, según la información policial, llevó la pistola con la que se cometió un cimen.
Si las aguas bajaban revueltas a su alrededor, Brandon Miller (20 años) hizo poco por apaciguarlas en el partido de su universidad, Alabama, contra Arkansas. En la presentación de lo que sería un trabajado triunfo de sus Crimson Tide, un compañero de Miller hizo el gesto de cachear a este como si buscara armas mientras el alero levantaba los brazos como se suele hacer en estas situaciones de control de seguridad. Así que después del partido (86-83 con 24 puntos y 6 rebotes de Miller) solo se hablaba de ese (como mínimo, muy poco sensible) gesto. Los que intentaban quitarle hierro, aseguraban que ha sido una rutina de presentación habitual en el equipo desde el inicio de la temporada. Pero, en todo caso, parecía un excelente momento para eliminarla del ojo público porque el pasado martes un detective Tuscaloosa, sede de la Universidad de Alabama, testificó que Miller entregó a su ya excompañero Darius Miles (21 años) el arma que utilizó para, supuestamente, asesinar a la joven de 23 años Jamea Jones Harris.
Nate Oats, el entrenador de Alabama, no estaba precisamente feliz después del partido: “No me fijo en la presentación de los jugadores, no estoy implicando en lo que hacen o dejan de hacer, estoy mirando las jugadas y el esquema del partido. Pero, desde luego y en todo caso, es totalmente inapropiado. Ya lo hemos hablado internamente y puedo asegurar que no se va a volver a ver en lo que queda de temporada”. Este caso policial está marcando la temporada de College, que ya se acerca al tradicional y masivo desenlace del March Madness, porque Alabama es líder de su Conferencia, la poderosa SEC (25-4) y Brandon Miller está señalado como uno de los grandes proyectos NBA de esta camada universitaria. Un alero muy grande (2,06) y con un instinto anotador tremendo, letal desde la larga distancia, promedia 19,7 puntos y 8 rebotes y es top 5 en casi todos los mock drafts. De hecho, lo normal es encontrarlo en el pick 3, detrás de los dos intocables: Victor Wembanyama, segurísimo número 1, y el base Scoot Henderson, segurísimo numero 2.
Al día siguiente de la declaración del detective Branden Culpepper, Miller jugó y anotó 41 puntos en el ajustado triunfo de su equipo (76-78) en pista de South Carolina, donde fue fuertemente abucheado. Esta vez, contra Arkansas y en su casa, el público se volcó con él. Según Culpepper, Miller, que no ha sido acusado de ningún delito, llevó a Miles el arma que este usó para, en un tiroteo a la salida de un club nocturno, matar a Harris el 15 de enero. Miles, con cargos de asesinato, fue expulsado de la Universidad de Alabama en cuanto se conocieron los hechos.
Culpepper, el detective, testificó que Miles había culpado de disparar al arma al otro detenido por el homicidio, Michael Lynn Davis, que a su vez declaró ante la policía que no recordaba nada porque había bebido demasiado tequila. La jueza Paula Whitley confirmó que Miller no estaba acusado y que su actitud había sido “de cooperación”. Al parecer, Miles dejó un arma en el coche de Miller, que le llevó al local nocturno, y luego le escribió un mensaje de texto para pedirle que se la llevara. Según las investigaciones, Davis cogió el arma del coche siguiendo las indicaciones de Miles. Después, se produjo el tiroteo en The Strip, una zona de ocio en la que se cruzaron los disparos que alcanzaron al coche de Miller y mataron a Harris, que iba en el asiento del copiloto en un vehículo que conducía su pareja, que también disparó (según su versión, en defensa propia) y luego dio parte de lo sucedido a la policía de Tuscaloosa.