El Magariños es inexpugnable
El Movistar Estudiantes doblega con autoridad al Tizona Burgos. Protagonismo de Carrera. Siete victorias en siete duelos en el Magata en LEB.
El Magariños es un pabellón especial. Pequeñito, acogedor, huele a pura historia del baloncesto. Es un templo para este deporte. Y desde que el Movistar Estudiantes descendió a LEB Oro y juega algunos de sus partidos por temporada allí, se ha convertido en una fortaleza inexpugnable: siete de siete. El último en caer, este miércoles, el Tizona Burgos (103-85), que aguantó un cuarto y medio el empuje colegial. Es la primera vez que los madrileños superan la centena este curso.
Fueron 15 minutos de cierto acierto exterior burgalés, de localización de las rendijas que dejaba la defensa local. Pero cuando ahí estaban, 42-35 tras una canasta de Jacobo Díaz, apareció Michael Carrera. Espectacular. El venezolano algo perdido en el inicio de temporada, por la lesión del Mundial que le dejó fuera la pretemporada y la primera jornada liguera, se encontró contra el Tizona. Cerró con 20 puntos y 4 rebotes para 21 de valoración con dos minutos esplendorosos en el segundo cuarto: del 4:39 al 2:41 anotó 11 tantos con un triple más dos 2+1 que elevaron el marcador hasta el 53-39. Desde ese momento, solo hubo un equipo en pista y fue azul.
Eso sí, la puesta en escena, la presencia durante 40 minutos de los castellanos fue de admirar. El recién ascendido nunca bajó los brazos. Hubo orgullo. Mucho. Tiró del ritmo alto que tan buen resultado le ha dado en estas primeras jornada, pero en esta ocasión el triple no fue su aliado con un 9 de 29. Quién a hierro mata… Muy bien Parrado en su pique con Carrera. Jacobo Díaz es el pilar de este equipo y Gerard Jofresa, el hijo de la leyenda Rafa Jofresa, tiene descaro y muchísima calidad.
Con esto actores, el Burgos empezó duro. Rotando mucho desde el principio, mantenía el pulso con los estudiantiles, que con seriedad, sin prisas y con acierto (4 de 6 desde el triple en los primeros 10 minutos) conseguían la primera gran ventaja al cerrar el cuarto inicial (30-22). Fue la segunda unidad, como ante el Alicante, quien dio ese primer estirón con una novedad: Nzosa estuvo bien, en defensa, poniendo sus centímetros ante las torres visitantes y en ataque, leyendo bien el pick and roll. Cuatro puntos seguidos del pívot dieron paso a la inspiración de Dee: triple y +15 (37-22). El estadounidense se fue a los 16 puntos (4 de 5 desde el perímetro).
La aparición de Carrera, sus 11 puntos, rompió completamente un duelo que el Estu ya controló. Pequeños amagos de rebelión que eran rápidamente sofocados por la artillería madrileña, que puso el +24 (102-78) con 60 segundos por disputarse. Nueva victoria, la cuarta en cinco jornadas y la tercera seguida. Una imagen cada día mejor y nueva cita el próximo domingo frente al Clavijo en Logroño (12:00 horas, LaLigaSports).
Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todas las claves deportivas del día.