Más competencia para Usman Garuba

El año I de Usman Garuba en la NBA no ha sido sencillo. Problemas, dificultades, poco juego y una ligera decepción, un sentimiento que siempre depende, claro, de las expectativas. Garuba ha jugado poco, se ha lesionado, ha sido relegado a la G League en varios momentos de la temporada y ha tenido un año inicial que dista muchos de otros que nos acostumbraron mal y vinieron también de la Liga española: en el siglo XXI, los Gasol, José Manuel Calderón o Ricky Rubio han personificado el baloncesto nacional en Estados Unidos y han triunfado, en mayor o menos medida, en la mejor Liga del mundo. Por eso, quizá, nos cuesta tanto que alguien tenga un año tan atípico desde el punto de vista de los aficionados y analistas del otro lado del charco.

Exjugador del Real Madrid, un club que sigue con detenimiento tal y como ha asegurado a AS, el español dio el salto a la NBA muy joven, tras una temporada en la que cobró mucho protagonismo en el equipo blanco, especialmente en una serie ante el Efes en la que se salió y ganó enteros de cara al draft. Eso sí, al final acabó seleccionado más lejos de lo que se esperaba en un inicio (se fue al número 23) y chocó con la realidad de la mejor Liga del mundo. Garuba es un jugador muy físico, que ayuda en el rebote, puede defender a exteriores, es veloz y atlético... un perfil muy repetido en la NBA, donde los jugadores así son más que comunes. El buen nivel de Alperen Sengun, competencia directa, le ha privado de tener más minutos, y las rotaciones constantes de Stephen Silas le han dado escasas oportunidades.

Al final, Garuba ha disputado 24 partidos en la NBA, 2 de ellos como titular, aunque finalizó bien la temporada, con siete encuentros consecutivos, su mejor racha de la temporada. Su intención sigue siendo mantenerse en la mejor Liga del mundo y, con 20 años recién cumplidos, seguirá trabajando para buscar su sitio en una competición que, si bien no espera a nadie, siempre da una oportunidad. Y ahí es donde deberá estar el jugador español, atento a cuando llegue el momento y se desaten las hostilidades, muestre su utilidad y desarrolle todo su potencial. De momento, su mente está puesta en el próximo Eurobasket, que empieza en septiembre. Un buen examen antes de su temporada con los Rockets y en el que deberá dar un paso adelante tras el paso a un lado de la generación dorada de la Selección. Una previa de su segundo año en la NBA. Uno en el que espera algo más.

Eso sí, a Garuba le ha salido nueva competencia. Jabari Smith, favorito para ser número 1 del draft, cayó al tercer puesto (Magic y Thunder seleccionaron por delante a Paolo Banchero y Chet Holmgren), acabó en los Rockets. Una muñeca prodigiosa para un 2,08 que hasta el último momento fue favorito para el primer puesto, finalmente formará una brillante pareja joven junto a Jalen Green... en un puesto para el que también opta Garuba, que ya tiene por delante a Alperen Sengun. Una dificultad añadida para el joven español, que tendrá que seguir peleando por encontrar su sitio y, sobre todo, conseguir minutos en la NBA. Garuba asegura que es “mejor jugador que antes” y seguirá en persecución de su sueño a pesar de esa nueva dificultad, en forma de estrella potencial. Así están las cosas.