Irving se arrepiente de haber abandonado a LeBron
El base de los Brooklyn Nets asegura que si hubiera tenido entonces "la madurez" que tiene ahora, seguramente no se habría marchado de Cleveland.
Kyrie Irving es uno de esos jugadores que siempre está en boca de todos y muchas veces no es por su desempeño dentro de la pista. Aunque la eliminación de los Nets en primera ronda de playoffs (4-0 ante los Celtics) ha sido sonada y aún está por ver qué consecuencias deportivas tiene de cara a la próxima temporada, el base ha sido más protagonista a lo largo del curso por su negativa a ponerse la vacuna contra la Covid y la imposibilidad de jugar una gran cantidad de los partidos como local por las normas sanitarias de Nueva York.
Pero esta no es la primera polémica en la que se mete. Más allá de sus extravagantes costumbres, como la de quemar incienso antes de los partidos, o sus ideas de otro mundo, como decir que la Tierra es plana, también son conocidos los problemas de vestuario que le han acompañado. Su relación con James Harden en Brooklyn no era la mejor del mundo, aunque en este caso no es fácil decir quién tenía más culpa. Pero Irving ya salió mal parado de Boston, donde criticó a sus compañeros, y antes se marchó por la puerta de atrás de Cleveland. Una ciudad en la que debería ser un héroe teniendo en cuenta la importancia capital que tuvo en el anillo de 2016.
Cinco años después de marcharse de los Cavs, el base ha hecho unas declaraciones en las que parece arrepentirse de aquella decisión: "Si hubiera tenido la misma madurez entonces que ahora habríamos ganado más campeonatos porque habría habido una mejor comprensión sobre lo que me pasaba. No sabía cómo compartir mis emociones, no sabía hacer eso. En lugar de compartirlo, me aislé".
Además, también habló de su relación con LeBron: "No hablamos durante ese tiempo. Cuando recuerdo lo que estaba pasando en ese momento, desearía haberlo hecho porque habría sido una buena manera de comprender lo que nos iba a deparar el futuro a los dos. Y sabemos cuánto potencial teníamos los dos juntos. Él y yo juntos dirigiendo Cleveland, poder armar un mejor equipo cada año... Definitivamente habría valido la pena”.