Derrota inesperada de los 76ers y toque de Rivers a Harden
Pese a que el banquillo no aportó, Rivers les disculpó y puso la mira en Harden. Los locales sacaron ante Philly un triunfo con brillo de Cade (27 puntos).
Los Sixers se llevaron un golpe con el que no contaban en Detroit. Pese a lo ilusionante de su nuevo proyecto ya lo pasaron mal en Orlando, la pista de otro de los peores equipos de la Liga, y en el Little Caesars Arena directamente llegó la derrota. Un horrendo último cuarto en el que las decisiones en ataque fueron pésimas, demasiado individualizadas y sin directrices claras, en las que no hubo conexión entre jugadores y técnicos y en la manga sólo se anotaron 15 puntos, mandó al hoyo al conjunto de Filadelfia. Y con malos modos después de una caída fea, que es lo peor para un conjunto que, según su plantilla y lo que palpable desde que Harden llegó a la misma, aspira a llevarse el título en los próximos meses.
'Doc' Rivers tuvo otro momento incómodo al tratar de explicar el porqué de perder este jueves por la noche. En la rueda de prensa se le cuestionó la penosa actuación de los suplentes de su equipo en oposición a la de los Pistons (39-8 de diferencia entre unos y otros) y el entrenador, en vez de ahondar sobre ello, les exculpó: "No lo han hecho tan mal, en su defensa. No han tenido tantos tiros". Y, seguidamente, dijo esto: "Ha sido más cosa de James [Harden] durante esos momentos". El técnico se quedó a mitad de explicación, por lo que no se debe entender como que culpara de la derrota a Harden, pero -y teniendo presente el motivo por el que Ben Simmons decidió salir del equipo, que no fue otro que la crítica interna hecha pública- resulta llamativo este toque de atención y más cuando el técnico había pedido más agresividad a su barbudo base en la ofensiva hace apenas dos días. Harden tiró de carrete y no estuvo acertado: 4/15 en tiros para 18+9+7. El mejor de los visitantes fue Joel Embiid (37 puntos y 15 rebotes).
Los Pistons se salieron con la suya y firmaron una victoria en casa para poner en valor al talento joven con el que juegan. Cade Cunningham fue, con 27 puntos, el mejor de la noche y es, después de toda esta temporada, candidato a ser el Novato del Año pese a que los resultados no hayan acompañado. Este equipo se juega el ser o no ser el último clasificado de la competición con Magic y Rockets y este triunfo les distancia del farolillo rojo. La comparación es dañina para los Sixers, que están en el cuarteto de cabeza de la Conferencia Este y perdiendo aquí caen a la cuarta plaza en un día marcado con equis en las elucubraciones sobre partidos ganables.