Resúmenes y resultados de NBA: partidos de hoy, 10 febrero

Así se debuta en un nuevo equipo. Domantas Sabonis sumó 22 puntos, 14 rebotes y 5 asistencias, con todas las virtudes que le hemos visto exprimir en Indiana Pacers, y estrenó con victoria su vida en Sacramento Kings, un equipo tan extraño que pasa de perder por 20 a ganar por 13 al mismo rival en 24 horas y después de orquestar un traspaso muy criticado y que rompió el corazón del vestuario y de la afición por la salida del prometedor guard Tyrese Haliburton. Pero las victorias lo curan todo, y con Haliburton en Indiana guste o no guste, la historia empieza de cero con Domantas Sabonis. Y empezó bien: victoria (132-119) contra unos Timberwolves que patinan y quedan en 29-26, en el séptimo puesto del Oeste. En la zona play in que persiguen los Kings, todavía a dos partidos y medio del décimo puesto.

Sabonis hizo lo que sabe: producir, conectar en ataque a un equipo en el que De’Aaron Fox (que acaba de volver tras lesión) y Harrison Barnes parecieron revitalizados: 27+8+3 del base y 30+8+3 del alero, dos jugadores que están en el mercado pero que los Kings no traspasarán si apuestan por pelear este año por el play in. Veremos qué pasa hoy. De los que llegaron de Indiana, también debutó con muy buen pie Jeremy Lamb, otro talento en ataque: 14+6+5. Los Kings se dieron un homenaje en el día más oportuno, para quitarse un poco la pena por Haliburton y frente a un equipo emergente en el Oeste, unos Wolves cansados y que solo fueron superiores cuando D’Angelo Russell (29 puntos, 10 asistencias) aprovechó las carencias defensivas de unos Kings mejores con el rookie Davion Mitchell en pista (18+7+7). Karl-Anthony Towns no tuvo un buen día pero acabó con 21 puntos, 7 rebotes y 8 asistencias, y Anthony Edwards (26 puntos) fue a menos. Loks Kings abrieron la brecha, con producción de Sabonis y Fox, donde muchas veces se han hundido, en el inicio del último cuarto: parcial de 14-2 y 126-117.

Los Warriors se estrellan en Salt Lake City

Después de nueve victorias seguidas, los Warriors (111-85) jugaron un partido espantoso en Utah y perdieron con todas las de la ley. Caen a un 41-14 que les deja a tres partidos y medio de unos Suns que empiezan a parecer inalcanzables. Los Jazz han cerrado su sangría: cuatro triunfos consecutivos y 34-21, un islote entre Grizzlies y Mavericks, asentados en el cuarto puesto del Oeste. Que tal y como estaban las cosas hace unos días, no es poca cosa.

Todavía sin Draymond Green y sin Klay Thompson ni Andre Iguodala, los Warriors fueron una caricatura a partir del segundo cuarto. En el tercero, anotaron 8 puntos y 2 canastas en los últimos nueve minutos, y perdían 92-67 a 8:47 del final. Solo el acierto en el tramo de cierre, ya en los minutos de la basura, les permitió elevar sus porcentajes a un incluso así pésimo 36%. Stephen Curry, otra vez terrenal, se quedó en 16 puntos con un 5/13 en tiros. Andrew Wiggins anotó 13 puntos, Jordan Poole 18… Fueron mucho mejores los Jazz: 23 puntos de Bogdanovic, 13 de Conley y Clarkson, partidazo (sin Gobert) defensivo de Whiteside (9 puntos, 17 rebotes, 7 tapones) y 14+10+8 de Donovan Mitchell, que rondó el primer triple-doble en catorce años (desde Carlos Boozer) para unos Jazz que estaban con un pie en el ataúd pero han cogido aire otra vez.