Los tentáculos de Doncic comienzan a extenderse

Pese a salir de lesión, más madera para Doncic. Segundo partido de esta tanda de dos citas en dos noches y segunda titularidad para él, que no descansa más ahora que viene de hacerlo durante diez encuentros consecutivos. Tiene hambre y el comienzo al trote cochinero del partido ante los Thunder era sólo para eso, para ir cogiendo un poco de ritmo y mirar el horizonte con optimismo. Los Nuggets llegaron a Dallas, donde se disputaba este choque, y quedaron anulados por no sólo el esloveno, que ya dominó durante una franja de tiempo mayor y se mostró más recuperado que en su redebut, sino por la fuerza del conjunto. De extrañar por una parte y de admirar por otra que los Mavericks ofrecieran esta versión, tapando agujeros porque los tienen, ante uno de los destinados a estar por encima de ellos. 

La habitual muleta de Brunson no va a estar siempre y los Mavs ansían que haya otras opciones para Doncic. Bullock, que necesita meter sus tiros, y Powell, que debe resonar más en la zona, metieron 15 puntos cada uno para ser ese soporte de segundo nivel que tanto necesitan. Porzingis no está estos días por entrar en el protocolo del coronavirus y Doncic tiene que tener mejor comparsa si otros, como es el caso de Tim Hardaway en este partido, fallan y no deberían. 

No es la estadística un aporte fiable en algunas ocasiones, pero sí esta vez si queremos destacar la buena reacción de los Mavericks a las adversidades. Porzingis faltaba, Marjanovic tampoco está y los interiores que tienen son más bajos o con menos capacidad reboteadora, algo que se notó en que los Nuggets atraparan 47 rechaces y ellos sólo 28. Pero ni se notó en el total de lanzamientos perpetrados, que debería haber ocurrido, ya que robaron el doble y forzaron 25 pérdidas del rival mientras ellos se mantuvieron en 11. Subieron las líneas donde lo necesitaron. 

Los Nuggets recuperaron a Hyland para la rotación, pero en mitad del partido perdieron a Cancar por una lesión. Nikola Jokic mantuvo la línea, pero no lo hizo un Facu Campazzo que venía de firmar su máxima anotación de la temporada y se quedó hoy en sólo ocho puntos y jugando más de media hora. 

Este 103-89 se cimentó, para los Mavs, desde la defensa y no sólo por doblarla para parar a Jokic. Algunos de los toques en la línea de pase o de creación llevaron a contragolpes que hicieron mucho daño a los Nuggets. El arreón importante llegó al acabar el primer cuarto y empezar el segundo, elevándose una decena de puntos por encima de los visitantes metiendo el turbo y en apenas cinco minutos. Un triple de Bol quedó enlazado con un taponazo cuando iba a meter la segunda canasta y que, segundos después, pisara la línea; el doble error del africano, un triple de Bullock, una bandeja a la contra de Green, un triple de Hardaway y un robo de Powell elevaron a los altares a los texanos, que se veían con muchas posibilidades sabiendo el daño que estaban infligiendo. Doncic (21+8+15+4) fue ganando enteros con los minutos. Denver metió algo más de presión con la salida de los suplentes en el tercer cuarto, atosigando a Dallas en el marcador, pero se perdió poco más tarde. El correcalles en el que se convirtió el partido durante el último periodo nos hizo a ver a Powell metiendo un triple pero, sobre todo, a los Mavericks sumando tres en las acciones en las que los Nuggets sumaban sólo dos, dejando esa victoria cada vez más lejana para los segundos. Tiros exteriores de Doncic, Brunson, dos de Bulllock, Finney-Smith y un 2+1 de Hardaway hicieron explotar la tímida resistencia de los de Colorado.