NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

NBA | CAVALIERS 124 - ROCKETS 89

Los Cavs son el equipo de todos

Exhibición ante unos Rockets en cuadro y nueve victorias en once partidos para los de Ricky Rubio, que dio un recital de dirección en la primera parte. Usman Garuba tuvo minutos.

Los Cavs son el equipo de todos
David RichardUSA TODAY Sports

La máquina no frena. Los Cavaliers son uno de los mejores equipos de la NBA. No solo uno de los más divertidos, de los que más transmite. No solo la gran revelación: también son uno de los mejores. Después de 30 partidos no hay ninguna duda. Han ganado 18 de ellos (18-12) y son cuartos del Este. Y eso a pesar de un tramo en el que fueron devastados por las lesiones. Y contando con un calendario que no dio tregua durante todo el primer cuarto del curso. Entonces, en las duras, sacaban adelante los partidos como podían. Y ya era mucho. Ahora que la cosa va aflojando, se lo están pasando además en grande. Tras apalizar a los Rockets (124-89) enlazan cinco victorias seguidas y nueve en once partidos. Las nueve han llegado por al menos diez puntos de margen. En diciembre están 6-2 con un +17,7 en anotación. En sus últimos cuatro partidos, han saldado las primeras partes con un +92 total. Esta vez fue un 69-38 que antes, al final del primer cuarto, era un 35-16. Y cuando acabó el tercero, un 100-63. Sin historia.

Ayudó, claro, la situación raquítica de los Rockets. Un equipo, y en este caso no por la COVID, que se presentó sin Ohio sin cuatro teórico titulares, y sus cuatro máximos anotadores, y un quinto importante de la rotación. No estaban Christian Wood, Eric Gordon, Jalen Green, Kevin Porter y Danuel House. Además, John Wall no regresa con el equipo no por esas, claro. Así las cosas, lo que les quedaba a los Rockets era intentar tener un día iluminado, porque además jugaban contra un rival embalado. Y tuvieron, todo lo contrario, uno nefasto: 5/29 en triples, 20% en tiros de campo ya al descanso, 5/20 solo en el primer cuarto. El técnico Stephen Silas, para colmo, tuvo que dejar el banquillo, deshidratado. Y así, en mero plan de supervivencia, los Rockets (9-19) se estrellaron con estrépito. Al menos, sin Jalen Green (el número 2), lució el resto de la camada de 2021, especialmente (como casi siempre) el pívot turco Alperen Sengun: 19 puntos, 11 rebotes y 5 asistencias. También Josh Cristopher (17 puntos, 4 asistencias) y Usman Garuba, que ante la catarata de bajas de su equipo tuvo sus primeros minutos NBA en un mes. Jugó 17 y acabó con 3 puntos y 4 rebotes.

El partido fue pan comido para unos Cavs que no tuvieron, por molestias en la cadera, al tremendo Evan Mobley. Así que no hubo duelo entre los números 2 y 3 del último draft. Casi no hubo ni partido. La inercia de los de JB Bickerstaff fue un tsunami contra un rival muy menor. Darius Garland, que pinta a all star ya (lo será muchos años) anotó 17 puntos en la primera parte y 21 en total. Jarrett Allen, otro que apunta a una cita que será precisamente en Cleveland, no necesitó excesos (6+9+4). E Isaac Okoro alargó su momento dulcísimo (20 puntos, 7/9 en tiros). El número 5 del draft de 2020 (tiene todavía 20 años) ha resurgido tras la lesión de Collin Sexton, primero desde su excelente trabajo defensivo y ahora con confianza en ataque. La guinda que le faltaba al maravilloso núcleo joven de estos Cavs, que redefinen su techo semana a semana.

En gran parte, claro, gracias al liderazgo de dos veteranos deluxe: Kevin Love acabó con 15 puntos y 6 rebotes y Ricky Rubio, un día después de superar las 5.000 asistencias, dio un recital en la dirección: 8 en la primera parte para 12 totales. Y 4 robos y 7 puntos. El español cerró con un robo y un pase por la espalda el primer cuarto (una paliza) y sirvió en bandeja a Okoro después el mate de la noche. Sigue su idilio, inesperado hace apenas unos meses, con estos Cavs, el equipo que se está convirtiendo, esta temporada, en el equipo de todos. Sobran las razones.