España luce logotipo

El día que estrenaba en su camiseta de edición especial el logo que le distingue como campeón del mundo en 2019, la Selección cumplió con los pronósticos y, en espera de lo que se le viene ante la Georgia de Shengelia y Shermadini, despachó con facilidad a Macedonia del Norte (65-94) en el primer partido de clasificación para el Mundial de 2023. Una victoria obligada después de un primer tiempo titubeante desde el perímetro y el puñetazo en la mesa del tercer cuarto, donde firmó un parcial definitivo de 17-29. Quien recordará como nadie el partido en el Jane Sandanski es Yankuba Sima, que el día de su debut fue el mejor jugador de España, con 15 puntos. Felicidades.

Pese a que España se escapó hasta los once puntos al descanso, en la primera parte llamó poderosamente la atención el pésimo porcentaje en el lanzamiento triple. Jugadores con buena mano como Colom, Brizuela, Arostegui, Jaime o el mismo Sastre en tiro parado, apenas acertaron hasta un sorprendente 18,75% (3 de 16). En cambio, la Selección hizo los deberes en los tiros libres (10/11) y respiró con la aparición de Yankuba Sima Fatty, que en su debut con la Selección estuvo dominador bajo los aros y sumó nueve puntos en ocho minutos. Scariolo le felicitó cuando Guerra volvió a la cancha en el lugar del gironí. En Macedonia, sólo Wiley representó cierta amenaza. Dragan Bajic intentó sorprender con la presencia en el quinteto de Simic, chico de 17 años de la cantera del Barça, pero no le funcionó (en la segunda parte, sin embargo, el azulgrana se fue a los 18 puntos).

Pero había deberes. Scariolo debió decir algo dentro del vestuario visitante al descanso (30-41) porque la Selección salió con otro nervio, dispuesta a liquidar el trámite. Un parcial de 0-8 en 1:25 obligó a Bajic a pedir tiempo muerto, tal vez consciente de que lo peor estaba por venir. Los triples empezaron a entrar, España jugó a placer y sin resistencia y la distancia no paró de crecer. Antes de irse al banquillo a descansar para el lunes, López-Arostegui y Jaime llevaron la diferencia a 33 puntos (37-70. Un parcial de 15-0 de Macedonia, que aprovechó la relajación española, maquilló algo el marcador. Dos triples de Dani Pérez enfriaron el ambiente y el partido agonizó lentamente. 65-94 en Skopje, partido a la videoteca de Sima y la Selección, al avión. En Jaén espera el primer hueso de la clasificación.