NBA | HAWKS 113 - MAVERICKS 87

Severo revés inicial para los Mavs

Luka Doncic no tuvo la noche y, como él, el resto de sus compañeros de los Mavericks. Comienzo torcido para Kidd: -26 en Atlanta ante los Hawks.

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Primer partido de la temporada para Hawks y Mavericks, los equipos unidos eternamente por Trae Young y Luka Doncic, y sensaciones muy distintas para los dos. Venían de hacer un buen papel en el final de la pasada campaña, pero quedándose en un punto diferente del camino. Los de Georgia avanzaron más en su búsqueda del campeonato y tienen, por plantilla, mayores aspiraciones. La diferencia en la noche del jueves, la de apertura de campaña para ambos, fue demasiado dispar como para no pararnos en la misma. 26. No hubo color y ni siquiera se aplicó maquillaje. 113-87. La puesta en escena de los texanos, que gozan de aire fresco con la llegada de Kidd al banquillo, estuvo muy por debajo de lo que se espera de un proyecto afianzado y que no debe dar pasos hacia atrás. 

Los Mavs se van de su primer envite con una sensación muy mala, sin tocar los noventa puntos en el casillero propio cuando en los últimos dos años han sido una máquina de meter. Enfrente está uno de los bloques más jóvenes y que con más violencia está progresando en la competición, es cierto, pero la imagen debería haber estado un poco más cuidada. Perdieron la batalla del rebote por cinco y la de las asistencias por quince, se quedaron en un 30% en triples cuando los Hawks metieron un 42%, sólo acertaron con uno de cada tres tiros en juego, etc. Un muy mal partido que entronca con detalles vistos durante la pretemporada y con las aspiraciones que, sobre el papel, tiene Dallas en la conferencia a la que pertenece. 

Un parcial de salida de 2-10 fue contrarrestado rápidamente por el equipo local y dejó una primera laguna en el lado de Dallas: estuvieron los cuatro minutos siguientes sosteniéndose con sólo dos puntos más. Se mantuvo el equilibrio con buenas jugadas en estático de los visitantes, no llegó tan pronto la ruptura. Empezaron con Powell y Porzingis y realizaron acciones para que acabaran Kleber y Cauley. Bien ante ellos Dieng en ataque, dando una pincelada de lo bien que se puede combinar su estilo con el de Capela en la pintura de los Hawks. Sólo eran dos de distancia al término de la primera manga, aunque la tendencia cambiaría en la segunda. En sólo una secuencia los de rojo cogieron diez de ventaja, 41-31: tiro de media distancia de Collins, pelea de Capela por dentro, tiro de tres puntos de Young... Este último lanzamiento, en contragolpe y sin pensarlo demasiado, encendió la luz de alarma en el contrario, los Hawks se estaban empezando a sentir a gusto, quitándose los nervios propios del debut, y ahí son difíciles de parar. 

De la mano de Jalen Brunson, que con sus 17 puntos como suplente fue el mejor de los suyos, los Mavs impidieron que su contrincante se fuera demasiado rápido. Había que trabajarlo un poco más. Al descanso la diferencia era de siete puntos. El tercer periodo hizo el resto. A Luka Doncic empezó a pasarle por la mente que debía asestar golpes a triple limpio y atascó el ataque de los suyos. En defensa no son un primor y sufren si no hay contrapeso en el otro aro. Atlanta dio una cátedra de sus jugadas habituales, que no por poco novedosas iban a hacer menos daño: triple de Bogdanovic tras carretón, colgada por alto para Capela, tiro a cinco metros tras bloqueo de Young, jugada de recursos dentro del perímetro de Collins... Ahí se fueron. En medio cuarto estaban a 19 de distancia. Luego Cam Reddish, con la ventaja hecha, fue sumando en su cuenta a 20 puntos y para elevar también la colectiva. Sin marcha atrás, derrota por 26 para Dallas. 19+11 para Doncic al finalizar, pero con un 6/17 en tiros que no le dejó en buen lugar. En la parte local, además de lo ya comentado, su pívot suizo falló sólo un tiro libre y metió todo lo demás.