Axel Bouteille, un tirador de los de siempre, anotó el triple del millón a falta de 24 segundos. Definitivo para que el Unicaja terminase ganando un partido donde casi siempre estuvo por debajo en el marcador. El UCAM Murcia, con un baloncesto físico, bajó el pistón en el momento más inoportuno permitiendo la remontada malagueña con un parcial final de 1-11.

El partido empezaba un tanto embarullado, pero con intensidad. Micheal Eric, desafortunado, es reemplazado a los tres minutos por Nzosa. Las posteriores apariciones del internacional por Costa de Marfil son una rémora ante el empuje bajo tableros de Augusto Lima (acabaría con 12 puntos y diez rebotes) que siempre se motiva cuando se enfrenta con su ex equipo. El Unicaja defiende muy mal y Taylor hace lo que quiere. De un 23-27 a los 12’ se pasa al 40-31 del minuto 17. Un parcial de 17-4 que los tiradores cajistas maquillan parcialmente para llegar al descanso con 46-42.

El relato del medio tiempo anterior se mantenía tras la reanudación. Unicaja remaba a base de triples, los arreones eléctricos de Jaime Fernández y apariciones estelares de Bouteille y un Alberto Díaz que va a más tras recuperarse de su lesión. El poderío de Lima, McFadden y el recital de Taylor mantenían la delantera de los pimentoneros. Bouteille era el mejor argumento ofensivo de los de Fotis.

El UCAM controlaba el partido. Pero no podía evitar la sensación de que iba de más a menos.Tras un robo de Jaime precisamente a Taylor Unicaja se acercaba hasta 78-76 a falta de dos minutos elevando su intensidad y provocando dos lanzamientos errados de McFadden. Unicaja se pone por delante con 78-79 muchos minutos después a falta de 40 segundos, El partid está caliente y los árbitros pitan una técnica a Jaime Fernández por un intercambio verbal con Lima, que solo anota uno de sus dos tiros libres.

A falta de 24 segundos Bouteille coloca un triple sensacional (79-82). Un parcial de 1-9. En la última jugada Webb, marcado por Jaime, pierde un balón por mala selección de la decisión. Los malagueños remataron el parcial de 1-11 y se llevaron la victoria pese a ir casi siempre por debajo en el marcador. La magia de Bouteille y Jaime Fernández hizo posible lo imposible. Buen partido también de Alberto Díaz. Y que el UCAM se durmió. Unicaja termina con la mala racha de dos derrotas seguidas y los murcianos frenan su progresión.