Los Lakers, en crisis sin Davis: dura derrota ante los Wizards

La baja de Anthony Davis está matando a los Lakers. Suman 10 derrotas, son 3º y los Suns están al acecho. Son muchas novias las que tienen los puestos altos de la Conferencia Oeste y los angelinos, que empezaron muy bien la temporada, empiezan a despedirse de ellos. Tampoco está Dennis Schröder, aunque por el protocolo del coronavirus y no por una lesión importante. Lo del ala-pívot preocupa más, porque estará fuera hasta que llegue el parón del All-Star y ahí se decidirá cómo proceder para afrontar la parte final de la fase regular. No pinta bien y las alarmas han saltado ya varias veces en las oficinas de la franquicia.

El equipo suma ya tres derrotas seguidas y su próximo compromiso lo tiene en Utah ante los Jazz, el líder de la NBA. Esta pasada noche ha caído ante los Wizards, uno de los conjuntos más inestables de toda la Liga. En una prórroga, con los Lakers habiendo soportado varias en el último mes. Les están llevando al límite y un nivel excelso no se puede mantener mucho en circunstancias de tanta incertidumbre como las que se viven últimamente. Mucho peligro en Los Ángeles. 

Otra de las malas noticias para los de Vogel se llama LeBron James. Es el que, evidentemente, más peso está llevando, pero con 36 años no debería jugar 43 minutos y día sí y otro día también. Al final pasa factura. Frente a los Wizards cumplió con el expediente pero no llevó a los suyos a la victoria: erró un tiro libre para ganar en el tiempo reglamentario y un triple, sumado a otros siete nueve intentos, para empatar en el tiempo extra. Es rey, pero cae como todos. Sus compañeros estuvieron mejor que ante los Heat y tampoco valió para nada. Sin Davis mirar a una pareja como Beal y Westbrook, que sumó 65 puntos, parece hasta de envidia cochina. 

El bajón físico se notó antes de que llegara la prórroga. El control era más que decente por parte del equipo local durante casi toda la noche hasta que se cayeron y sólo pudieron levantarse un poco. El primer cuarto ya dio la medida de lo que íbamos a ver: LeBron siendo imparable cuando atacaba el aro y también sabiendo dirigir a los compañeros. Los visitantes no sabían gestionar la presencia del de Akron y sólo sacaban la cabeza con acciones esporádicas, pero muy esporádicas, de su pareja estrella. La entrada a cancha de Caruso como base y Harrell como pívot propició el primer tirón importante, el que colocaría a los angelinos a más de diez de distancia tras el cuarto inicial. 

Poco a poco los Wizards se vieron más ligeros a la hora de proponer ataques. Sobre todo en el contragolpe es donde tuvieron más éxito, hacer correr a los Lakers les vino bien. El tercer cuarto fue su punto de inflexión. Había soporte porque aparecieron más jugadores: Bertans, Avdija y Hachimura, todos internacionales, les dieron otro aire. En el tercer periodo ya estaban ahí, muy cerca. 

El bajón llegó al principio del último cuarto. Casi cinco minutos sin anotar estuvo Los Ángeles. Se fueron ocho abajo cuando ya sólo quedaban cinco minutos. Les tocó remontar pese a haber tenido todo el partido en la palma de su mano. El brasileño Raulzinho Neto, pese a que la estadística no lo refleja, se marcó un partido excelente en cuanto a pelea, decisiones y atención al detalle que llevó a los rojiblancos a verse por encima. La lucha se llevó al triple, con un toma y daca con Gasol o Kuzma y Hachimura o Avdija como protagonistas, aunque la jugada decisiva la protagonizó LeBron James ante Russell Westbrook: manejo por la izquierda, búsqueda de contacto y tiro con falta, pero dejándose el adicional fuera del aro. Ese tiro libre condenó el partido a la prórroga. En los cinco de añadido dos canastones de Beal y una bandeja de Westbrook valieron, en contraposición a un triple lejano de LeBron y otro a la desesperada de Kuzma que apagaron toda opción de otro tiempo extra.