Los Bucks se caen y los Raptors aprovechan para machacarles
Quinta derrota seguida de los Bucks, dominadores del Este los dos últimos años, ante unos Raptors claramente en crecimiento. Giannis, desquiciado.
Giannis Antetokounmpo asegura que ha aprendido a convivir con malas rachas, y ya ha pasado alguna pese a ser el MVP reinante y haberlo ganado ya dos veces. Sus Bucks, pese a su presencia, no arrancan. Ahora no sólo se ven amenazados en el Este por los Nets del trío matador que forman Durant, Irving y Harden, también por unos Sixers que superan a todos en la clasificación con Embiid a tope. Los Bucks llevan cinco derrotas seguidas y los Raptors, campeones en 2019 precisamente eliminando a los de Mike Budenholzer, han sido el único equipo en añadirse a esa lista. El miedo empieza a llegar a Milwaukee, que no ha avanzado en la lucha directa por el título pero sí ha dejado claro estos años que controla la fase regular.
Giannis Antetokounmpo revela que está sabiendo relativizar las derrotas pensando que el siguiente día llega pronto, dado el calendario de la NBA y lo que en realidad significa esta fase de la campaña. Pero lo cierto es que, ante los Raptors, fue eliminado por faltas y sumando un codazo en la boca de O.G. Anunoby que coronó una actuación en la que se le vio nerviosísimo e impotente ante sus propios fallos. El griego se acercó al triple-doble, pero con 8/20 en tiros y cinco pérdidas. El tono adecuado lo marcó la estrella del equipo rival, Pascal Siakam, con 27 puntos. Normal Powell fue el máximo anotador con 29 puntos. Salta otra alarma ruidosa.
Se notó mucho la ausencia de Jrue Holiday, que es verdadero pegamento en la defensa. Los Raptors abrieron las costuras de los Bucks muy poco a poco, empezando con un sibilino movimiento de balón, con la aparición posterior de Thomas por fuera y Baynes por dentro como bisagras para Siakam, y con un Powell muy acertado. Los locales sobrevivieron por Giannis y algún triple esporádico en el primer cuarto, pero se dieron de bruces con la realidad en el segundo. No llegaban a defender bien a los tiradores, dejando demasiado espacio para que los de Nurse ejecutaran con paciencia. A mitad del segundo periodo la distancia ya era superior a los diez.
Un pequeño impulso tras el descanso llegó por parte de Milwaukee. En ataque. En defensa siguieron igual. No hizo falta Lowry, VanVleet se bastó sin estar demasiado acertado. La energía que aporta el otro Anteto, Thanasis, quiso que fuera un impulso para Giannis y el resto de jugadores, pero la buena disposición de los Raptors lo impidió. Cambios cuando Giannis se acercaba al aro y elecciones correctas para escoger la víctima al atacar. Middleton también estuvo flojo. La estrella helena, fuera por faltas antes de acabar y con franjas del partido en las que arrojó demasiada responsabilidad a sus colegas. Nada bueno saldrá para ellos de este cóctel.